Los alcaldes solicitan que se ensanche la carretera hasta Alija

Los alcaldes de los municipios que se beneficiarán por el arreglo de la carretera LE-114, en el tramo comprendido entre La Bañeza y Alija, manifestaron ayer su satisfacción ante esta medida, anunciada por la Junta de Castilla y León, pero mostraron cierta cautela hasta que se den a conocer los detalles del proyecto, ya que los regidores esperan no sólo el arreglo del firme prometido, sino también la ampliación de la calzada. En concreto, la inversión de 1,8 millones de euros contempla, según especificó la jefa del Servicio Territorial de Fomento en León, el refuerzo y el reciclado del firme y el ensanche en algunos puntos concretosos del trazado de la vía. El alcalde de Alija, José Antonio Prieto, señaló que no encuentra lógico mantener el ancho de una carretera que, en algunos puntos, «tiene cinco metros». Prieto, del PP, añadió que «deseamos que se realicen mejoras, pero que se hagan bien». Preferencias Su compañero de partido y alcalde de Santa Elena, Jorge Fernández, optaba por la prudencia antes de manifestarse sobre una actuación que desconoce. Indicó que espera entrevistarse con el director general de Carreteras y con la responsable dle servicio territorial en breve y manifestó que «prefiero que, por el momento, se deje como está y que en unos años se amplíe el ancho de la calzada». Luciano Martínez, alcalde de Quintana del Marco. del PSOE, señaló que «es una gran noticia, más teniendo en cuenta que los procuradores del PP votaron en contra de varias mociones para el arreglo en las Cortes». Aseguró que el tramo Alija-Nacional VI, arreglado hace años, es el que menos tránsito tiene y señaló sobre la obra que «menos es nada». José Miguel Palazuelo, regidor en La Bañeza, donde nace la carretera, manifestó su satisfacción «porque se trata de una partida importante y porque es bueno que la Junta se acuerde de la ciudad y la comarca, ya que esta carretera comunica municipios de las riberas del Jamuz y del Órbigo». Sin embargo, Palazuelo estima que «con este arreglo la Junta atiende una necesidad de la población de la zona, pero se olvida del tráfico de camiones que va a generar la estación de transferencia y del que produce el polvorín de Villanueva de Jamuz, por lo que sería necesario su ensanche». Palazuelo solicitó el arreglo desde el punto de origen de la vía, en el casco urbano de la ciudad.