La realización del nuevo plan de urbanismo costará 234.000 euros

El Ayuntamiento de Astorga dispone ya de una estimación de gasto para la revisión del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), que el concejal de Urbanismo, Marcelino Guerrero, situó ayer en 234.394,72 euros. El edil consideró ajustada dicha previsión y matizó que incluye 24.040,48 euros para la realización de la cartografía que acompañará al documento. Guerrero calculó que el pliego de condiciones para licitar la revisión del plan estará listo para el mes de enero como máximo, y que la salida a adjudicación será inmediata. El Ayuntamiento solicitará información sobre la posibilidad de acogerse a alguna línea de subvención de la Junta para la redacción de este tipo de planes, de cuya concesión dependerá que la revisión se realice en dos o más anualidades, dijo. El trámite constará de cuatro fases: la documentación de información urbanística -de cinco meses de duración, supondrá el 25% del coste-; la documentación para la aprobación inicial -cinco meses, 25% del coste-; informes de alegaciones y documentación para la aprobación provisional -cinco meses, 30% del coste-; y realización del texto refundido tras la aprobación definitiva -dos meses, 20% del coste-. El edil expresó su deseo de que el próximo año queden cubiertas las dos primeras fases. Modificaciones de crédito El grupo de gobierno planea incluir en el presupuesto municipal del 2005 al menos 51.086,03 euros, cantidad que podría aumentar con modificaciones de crédito en caso de lograr ayudas. El pliego de condiciones, que preparan los servicios técnicos municipales, establecerá como prioridad una serie de condiciones técnicas y, en segundo orden, las preferencias del Ayuntamiento, explicó Guerrero. Entre estas últimas figuran lograr un desarrollo armónico del núcleo urbano, reequilibrar el peso de los barrios en el entramado de la ciudad, mejorar las comunicaciones entre las distintas periferias y entre éstas y los viales más importantes, o conseguir nuevo suelo para la construcción. La revisión del PGOU, de 1985, -que a su vez sustituye al de 1977- es obligatoria tras la entrada en vigor este año del reglamento que regula la Ley de Urbanismo de Castilla y León (Lucyl), aprobada en 1999. Dicho reglamento obliga a los ayuntamientos que son cabeceras de comarca a revisar sus planes de urbanismo en el plazo de tres años. No obstante, Guerrero apuntó que Astorga ya preveía esta medida por considerar agotado el actual.