La policía detiene a un matrimonio por lesiones y amenazas mutuas

Funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía adscritos a la comisaría de Astorga detuvieron en un intervalo de pocos días a un matrimonio, bajo la acusación de sendos hechos delictivos en el ámbito familiar que ambos habrían cometido contra el respectivo cónyuge. Los hechos comenzaron el pasado 7 de diciembre, cuando los agentes detuvieron a la esposa, A.A.V., de 41 años y vecina de la ciudad, como supuesta autora de un delito de lesiones que habría cometido al agredir a su marido con un arma blanca. Diez días después la policía detuvo al esposo, J.A.C.G., de 43 años y también residente en Astorga, como supuesto autor de un delito de amenazas graves en el ámbito doméstico, que habría vertido contra su esposa. En ambos casos los detenidos fueron puestos a disposición judicial por el procedimiento denominado de enjuiciamiento rápido por determinados delitos. El juzgado decretó contra los dos medidas cautelares y de alejamiento, con carácter recíproco, aunque el matrimonio quedó en libertad. Tres detenidos por robo Mientras tanto, y según informó ayer la comisaría en un comunicado conjunto, los agentes detuvieron los días 17 y 18 pasados a tres jóvenes, como supuestos autores de un delito de robo con fuerza en un bar. Los arrestados, que responden a las iniciales A.S.G., de 18 años; R.P.H., de 23; y J.R.G., de 20, son vecinos de la ciudad con carácter temporal. Los hechos se produjeron en la noche del pasado 24 de noviembre en un establecimiento hostelero de la avenida de las Murallas, cuya puerta de acceso fue forzada, al igual que las máquinas del local. La joven A.S.G. y sus compañeros habrían obtenido en este robo 500 euros en efectivo y diversos aparatos por valor de 600 euros, según fuentes policiales. Los agentes realizaron la correspondiente inspección ocular del lugar de los hechos y la investigación posterior, en la que consideran haber obtenido suficientes elementos de prueba e inculpatorios para achacar la autoría del robo a los detenidos, a los que acusan de diversos grados de participación en aquél. La policía logró recuperar del domicilio de uno de los arrestados los efectos procedentes de la sustracción. A continuación, y una vez realizadas las diligencias pertinentes, la comisaría puso a los detenidos a disposición de la autoridad judicial, en concreto del juzgado de primera instancia número 2, que decretó su puesta en libertad. En otro orden de cosas, el colegio público Blanco de Cela fue víctima también de un robo que, según los primeros indicios, habría tenido lugar en la noche del viernes al sábado pasados. El botín sustraido, cuya cuantía económica no ha trascendido, consiste en varios productos de alimentación con los que el centro tenía previsto realizar una jornada de convivencia el mismo día 18. Al parecer, el lugar de los hechos no presentaba signos de violencia, y la hipótesis inicial pasa porque los ladrones pudieran haber accedido al interior del edificio por su parte trasera. El colegio presentó la correspondiente denuncia en comisaría, cuyos agentes ya iniciaron la investigación.