Entre 0,71 y 0,45 ejemplares por kilómetro cuadrado

La alta densidad de población de sisones, alacaravanes y aguiluchos cenizos, especies que se encuentran en estado de vulnerabilidad o casi amenaza, según la SEO, es el principal activo ecológico de la Zepa Eria-Jamuz. Desde un principio se señaló la importancia del sisón dentro de esta zona, ya que, según técnicos de la Junta de Castilla y León, reúne en el área la colonia más importante de Castilla y León. En concreto, la densidad de población de sisones en la Zepa se encuentra entre valores máximos de 0,71 y mínimos de 0,45 aves por kilómetro cuadrado, cuando en las lagunas de Villafáfila se registran 0,27 sisones por kilómetro cuadrado y la medida de la comunidad autónoma está en 0,15. El sisón es un ave esteparia, de la familia de las avutardas. En este mismo hábitat se encuentra el alcaraván y el aguilucho. Según las conclusiones del Simposio Internacional sobre Ecología y Conservación de aves Esteparias, celebrado el pasado mes de diciembre en Lérida, la principal amenaza para las poblaciones de estas aves «son los cambios en los usos del suelo, que se derivan, principalmente, de la intesificación agrícola a diversas escales y el abandono rural, sin olvidar la construcción de infraestructuras (centrales eólicas, carreteras...) y la progresiva urbanización del territorio».