La ausencia de un edil popular enfrenta al PP y al PSOE en el pleno

La corporación municipal de la localidad cepedana de Quintana del Castillo celebró ayer un pleno extraordinario solicitado por los grupos de la oposición, el PP y la UPL, y un edil díscolo del PSOE, con el fin de modificar diversos proyectos de obras. Estas propuestas fueron aprobadas hace unas semanas en solitario por cuatro concejales del PSOE, mientras el resto de los corporativos no entró al salón de plenos aunque permaneció en el exterior del Ayuntamiento. Al inicio de la sesión de ayer la portavoz del PP, Celia Arias, denunció que su compañero de grupo, ausente del pleno, había recibido por escrito supuestas amenazas y coacciones anónimas para que no acudiera a éste o, en caso de hacerlo, votara en blanco. El edil socialista Carlos Cabezas, y el alcalde Emilio Cabeza, aseguraron que su grupo no era responsable de estos supuestos hechos, que, según Arias, «benefician al PSOE». Momentos de tensión Tras unos momentos de tensión, que se acentuaron cuando la portavoz del PP protestó por la inclusión en el acta de la pasada sesión de comentarios sobre ella mientras permanecía ausente del pleno, el alcalde dio por cerrada la discusión. El regidor y los tres concejales que lo apoyan votaron en contra de la modificación de los proyectos de obras, mientras Arias, los dos ediles de la UPL y el concejal díscolo del PSOE votaron a favor. Cabeza empleó el voto de calidad del alcalde para desestimar la propuesta. El regidor consideró que ésta «no tiene sentido porque los proyectos se aprobaron en pleno dentro del plazo y el proceso era justo y legal». Por este motivo, Cabeza renunció a los honorarios que le correspondían por su asistencia a la sesión, decisión que también adoptó su grupo y la portavoz del PP.