Los organizaciones agrarias exigen compensaciones a los productores

Las organizaciones profesionales de León exigen que los ganaderos reciban compensaciones por los daños que los lobos producen en sus rebaños. Así, desde Coag, se considera que «la Junta debe asumir las pérdidas por vía patrimonial», mientras que desde Ugal-UPA se anuncia que los ataques serán cada vez más frecuentes. Los sindicatos agrarios subrayan la indefensión del ganadero ante estas situaciones, al «no existir las ayudas directas por ataques de lobos, excepto en los parques naturales», según confirma el secretario técnico de Coag-León, Óscar Herrero. «El lobo es una especie protegida a la que, en ocasiones, le dan de comer los ganaderos y es la Junta la que debe asumir las pérdidas por vía patrimonial». Desde Ugal-UPA, Matías Llorente explica que estos hechos no son tan aislados como podría parecer y la razón es que «cada vez hay más lobos», que han encontrado refugio en unas riberas en las que han proliferado las plantaciones de chopos. Con la única protección de un seguro que «sale muy caro», el ganadero ve cómo un ganado que «ha seleccionado durante toda su vida» se arruina por efecto del depredador, que «se ha salido de la reserva», resalta el secretario general de Ugal-UPA. Llorente destaca además e clima de «respeto que generan situaciones de este tipo entre la población rural. Aunque se diga que no ataca a las personas, el lobo siempre será el lobo». «Al albedrío del lobo» Aunque habla de «un peligro para el sector», Llorente aboga por la conservación del lobo, pero con un control, ya que las pérdidas que origina «no las compensa nadie», excepto en reservas naturales o en cotos de caza «en parte». El dirigente añade que «hemos creado normas para sacar los establos de los pueblos, dejando a los animales al libre albedrío del lobo». El presidente de Asaja en la provincia, Marino Fernández, aseveró que «ahora que protegemos a todos los animales, los indefensos somos nosotros».