La enfermedad de la lengua azul deja sin ovejas a la trashumancia

La fiesta de la trashumancia que ayer se celebró en Prioro no contó con la presencia de los grandes rebaños de ovejas y cabras de otras ediciones como consecuencia de la enfermedad de la lengua azul. Esta es una enfermedad que se trasmite por un mosquito y en Extremadura se han registrado casos mientras que Castilla y León es una zona libre de lengua azul, tal y como señaló el jefe del servicio territorial de Agricultura, Fidentino Reyero, quien estuvo en esta festividad de la trashumancia. «El transporte de ganado de una comunidad restringida como Extremadura a una comunidad libre como la nuestra tienen una serie de restricciones. Todo el ganado tanto ovino, caprino como vacuno tienen que subir vacunados y en vehículos desinfectados y precintados», según Reyero. Recordó que el control del desprecintado y descarga a la llegada del ganado a la montaña oriental se lleva realizando desde hace días dado que ya han llegado cerca de cinco mil ovejas desde Extremadura. «Lo que está prohibido es la trashumancia a pie por la comunidad», dijo Fidentino Reyero. Ante esta situación los actos de la fiesta de la trashumancia se centraron en una exhibición de perros de pastor con un pequeño rebaño de veinte ovejas de un ganadero del pueblo. Esta reses sirvieron además para hacer una demostración de la técnica de esquileo de ovejas. El Ayuntamiento de Prioro organizó un homenaje a los pastores del municipio y a sus rebaños además de aquellas personas que con la publicación de libros difunden el valor de la trashumancia de Prioro. La lucha leonesa de base en la categorías de infantil y juvenil fue otros de los actos que se vio sorprendido por la fuerte tormenta de agua que cayó al final de la mañana. Por la tarde se celebró una exhibición de arrastre de piedras con bueyes y se pudo degustar la tradicional rosca de Prioro. La fiesta concluyó con un baile que se prolongó hasta altas horas de la madrugada. El alcalde de Prioro, Francisco José Escanciano, dijo que a pesar del problema de la ausencia de ovejas , se sigue reivindicando la continuidad de la fiesta que cada año cuenta con numeroso público. «Actualmente está prohibida la trashumancia a pie por la comunidad» Fidentino Reyero Jefe de Agricultura de León