Título cuerpo 30 a 3 columna para noticias secundarias Más polémica

Texto DICE EL SECRETARIO provincial del PSOE, Miguel Martínez, que todo el mundo habla del famoso convenio (contubernio), firmado entre la alcaldesa lacianiega y Minero Siderúrgica de Ponferrada (MSP) sin haberlo leído. Y aunque así fuera, aunque no lo hubiéramos leído y lo criticáramos, pienso que estaríamos en nuestro derecho, pues hoy, en pleno siglo XXI, gobernando en España (o al menos intentándolo) el PSOE, que tanto criticó las maneras de gobernar de Aznar y los suyos, del decretazo, el ordeno y mando, del todo se hace por huevos, poco o nada han aprendido la lección. ¡O se creen que vamos a consentir al PSOE aquello que criticamos al Partido Popular, la política de hechos consumados sin vuelta atrás, el gobernar de espaldas al pueblo! Porque no es otra cosa que el hacer las cosas de espaldas al pueblo lo que la alcaldesa de Villablino ha hecho, firmando un convenio de manera personal, sin contar siquiera con el aparato de su partido en Laciana, porque convenía a las altas esferas del PSOE en León, en Castilla, en España. Viendo las maneras de actuar del PSOE, o al menos de su alcaldesa y los concejales que las respaldan, más bien parecería que estamos dando, no uno, sino unos cuantos pasos atrás. Uno recuerda una mascarada, montada por el entonces alcalde Pedro Fernández, allá por el 1994 del pasado siglo, para justificar lo injustificable, en la que después de invitar al pueblo de Laciana a asistir, vimos como el salón de plenos estaba tomando por su entonces crecida y fervorosa militancia, que prácticamente nos impidieron acceder al mismo. Ingenuamente pensábamos que aquellos tiempos y aquellas maneras habían caducado, pero viendo lo que ha ocurrido el pasado lunes en el mismo salón de plenos, no podemos menos que lamentar la ausencia total de democracia en Laciana. El citado convenio que Martínez dice que desconocemos, y que es positivo para el Valle, debería de ser, en primer lugar, si se quiere hablar de legalidad, tansparencia y ganas de hacer las cosas bien, un convenio en el que estuviese representado por un lado el pueblo de Laciana y por otro MSP. Pero no es así, está representado por un lado la alcaldesa, obedeciendo disciplinadamente las órdenes recibidas, y por otro MSP, imponiendo sus posturas. ¿Cómo se puede hablar de exigencia de legalidad en el artículo 2, cuando eso debería de ser una cosa imprescindible y perseguible si así no ocurriera? ¿O es que todo lo que se está haciendo hasta el momento es ilegal?. Algunos pensamos que no existe ni una sola explotación de las que se están llevando a cabo, ni de las finalizadas, ni de las que están por llegar que cumpla la legalidad. ¿No debería el señor Miguel Martínez, al menos como mano derecha de José Luis Rodríguez Zapatero en la provincia, de investigar este asunto?. No, lejos de hacerlo ampara maneras de actuar que nos recuerdan otros tiempos. ¿Y pensar que estos son aquellos que sacaron a la calle a miles de personas con el No a la Guerra?. ¿Será que el tocar poder obliga al ordeno y mando y nos hace olvidar lo demócratas que fuimos?