Los autos, cada vez más locos

Como en anteriores ediciones, la celebración del descenso de los autos locos congregó a un numeroso público que abarrotó el pueblo para presenciar este evento, que ya se ha convertido en un autentico referente de toda la comarca y de la provincia. Las valoraciones del público fueron similares a las del año pasado, mostrando todos un gran interes por la originalidad de los distintos modelos que se presentaron a competir. Todos los vehículos estuvieron expuestos antes de la carrera en el parque cerrado, con un gran ambiente festivo durante toda la tarde . El público disfruto a lo grande del desarrollo de las dos mangas de competición, tras las cuales resultaron vencedores Jorge García, en segundo lugar a Raul García, en tercera posición Marcos Franco «Fangio» y en cuarto lugar a Francisco Chamorro, todos ellos en la categoría de velocidad. En la de originalidad, el primer premio se lo llevo Francisco Chamorro por su Guagua cubana . El segundo puesto fue para Fernando Fierro por su Tanque de guerra y el tercero fue para Marcos Franco «Fangio» por su Ferrari . Todos ellos se repartieron en distintos premios 600 euros y numerosos trofeos. Con seguro personal Para poder participar se exigía entre otros requisitos, un seguro personal. La organización del evento corrió a cargo del Ayuntamiento de Cimanes del Tejar y de los miembros de la comisión de los autos locos y tambien contó con la colaboración de la junta vecinal. El alcalde, Genaro Martínez, se mostraba muy satisfecho del desarrollo de esta prueba, que año tras año ha ido ganado en categoría y número de publico asistente. «Estoy muy contento, pues no han surgido grandes problemas y todo se ha desarrollado bien y con total normalidad. Para el proximo año estudiaremos la forma de potenciar el circuito y realizar las mejoras necesarias, para hacer de esta competición algo más significativo si cabe en el pueblo de Cimanes del Tejar». Desde el punto de vista de algunos competidores consultados, quizá al recorrido «le faltan más metros hacia el monte para coger más inclinación y velocidad en el descenso. Queremos algo más artesanal y más participativo, para que se aumente el riesgo y la emoción. El circuito, por todo lo demás, esta muy bien».