El pedáneo denuncia que en el centro del pueblo «aún se pisa el barro»

Carlos Crespo, alcalde pedáneo de Pinilla de la Valdería, lamentó ayer que «en Pinilla de la Valdería, los vecinos pisamos barro en el centro de nuestro pueblo, mientras que, en Castrocontrigo instalan una barandilla de acero en la calle de La Borda que cuesta 10.000 euros». El presidente de la junta vecinal, de la UPL, aseguró en declaraciones a este periódico que «todos los años se repite la misma imagen cuando llueve, el centro del pueblo lleno de charcos y barro, que los vecinos deben sortear, si se puede, cuando van a coger agua al pozo o cuando van al bar, único local de reunión, junto con la iglesia, que poseemos». Crespo explica que en la actualidad, gracias a los planes provinciales de la Diputación provincial, se pavimenta el primer tramo de la avenida del Rector Lorenzo Turrado -antes José Antonio-, para «no dar servicio a nadie, porque al principio de la calle no hay ningún vecino. Resulta curioso, por otra parte, que los últimos metros de esta calle está asfaltado, mientras que los trescientos metros que atraviesan el centro de la localidad, que son como su plaza mayor, carecen de pavimentación alguna», se queja el pedáneo. Las obras de pavimentación con fondos de la Administración provincial «continuarán el año que viene y ya entonces servirán para algo, porque en esa segunda fase ya hay tres viviendas, pero el resto continuará como hasta ahora, sin pavimento y en el año 2005», añade Crespo, que denuncia lo que considera una discriminación entre las localidades que forman el término de Castrocontrigo, en lo que a infraestructuras elementales se refiere. Con ciento once habitantes en junio de 2004, Pinilla es el cuarto núcleo de población, en cuanto al número de habitantes.