CARTA TE ESCRIBO
La gran chapuza
QUERIDO hermano: Espero que, al recibo de la presente, tu salud siga tan terne. Por aquí vamos enderezando la situación, mientras esperanzados hacemos votos por la pronta venida de las ministras Narbona y Trujillo. . Sí, hoy tengo que escribirte de la gran chapuza; la que se está perpetrando en ese desvío de la nacional 120. Hace unas cuantas semanas te avisé de ello. La vía férrea del Oeste, la de Plasencia, quedaba cortada por la carretera. Todos creíamos que al realizar el proyecto el Ministerio de Fomento tendría en cuenta ese ferrocarril y habría paso elevado para preservar el trazado. Ahora resulta que, cuando creíamos que con el desvío se eliminaría el paso a nivel, lo que vamos a tener serán dos pasos en solamente medio centenar escasos de metros. Uno que es impenitente vigilante de obras y servicios se quedó pasmado hace un par de semanas al ver que la vía del Oeste se reponía; y a la vez le entró un gustirrinín de esperanza y credulidad en las palabras del director general de Turismo, el riberano Raimon Martínez Fraile, quien en su última visita apostó por la apertura de la vía. Ahora ya está todo planificado, delimitado y repuesto. Hermano mío; con cinco años consumidos del siglo XXI, llega el ministerio de Fomento y nos casca un paso a nivel cuando todas las administraciones están empeñadas en la eliminación de esos peligroso cruces. Y se ve que la cosa no tiene vuelta de hoja porque ya están esparciendo el asfalto. Y ahora, uno que es preguntón, curioso por naturaleza y profesión, se pregunta: esa chapuza que nos han montado ¿qué quiere decir? ¿Que para acallar algunas conciencias se repone la vía, aquí paz y en el cielo gloria? ¿Que el plazo de recuperación de ese ferrocarril es tan largo, a pesar de las promesas, y cuando se quiera recuperar no hará falta el paso a nivel? ¿Que para entonces ese murallón que han construido en la vega será sustituido por otro desvío? ¿O es que de verdad, como nos creemos los más pesimistas en la cuestión, nadie tiene intenciones de reabrir el ferrocarril? Una ingenuidad: Ayuntamiento, Cámara de Comercio, asociación de empresarios y demás fuerzas vivas -o moribundas- ¿qué dicen a esto? Y si se abre, hermano, ¿qué va a pasar? Pues calculo que tendrán que volver sobre los pasos y construir la carretera elevada, con el consiguiente coste, cuando ahora hubiera supuesto una inversión mucho menor. Otra pregunta ingenua y tonta dirás; digo yo: si algún día llega a esta ciudad el tren ese de velocidad alta o de alta velocidad, que ya es coña maragata eso de la denominación, ¿por dónde hace la penetración en Astorga? Se habla de la abandonada estación del Oeste a recuperar para ese fin; pero tiene que seguir a Ponferrada, que ya sabes es la gran ilusión de los bercianos. Pues mira, el único punto para acceder es por ahí precisamente, por donde el Ministerio de Fomento ha creado un paso a nivel. A no ser, claro, que ocurra lo que muchos han pensado; que Astorga no tenga la entidad suficiente para que ese bicho se detenga en la ciudad, que no pierda tiempo y así consiga la media de velocidad prevista. Lo cual quiere decir que el trazado se desviaría vete a saber por dónde, desde las torcas de Barrientos, y los astorganos que nos preciábamos de disponer de cuatro estaciones -la de invierno, la de infierno y las dos de ferrocarril-nos quedaríamos a tres velas. Y tendríamos que invocar al espíritu de Pío Gullón, Pedro de Castro y cuantos colaboraron con el ministro aquel, para que busquen a alguien que nos pueda echar una mano en este caótico dilema que se nos plantea. La chapuza, la gran chapuza, está consumada; ahora que vengan ingenieros a copiarla, que es obra maestra. Cuídate.