El colectivo expresa su inquietud ante el problema de un compañero que sufrió un accidente
Los profesores del IES sopesan recortar la actividad extraescolar
Los docentes se plantean realizar sólo los actos que no impliquen salidas del centro
Los profesores del Instituto de Enseñanza Secundaria (IES) de Astorga analizan la posibilidad de recortar las actividades extraescolares, a la vista de los problemas sufridos por uno de sus compañeros, Carlos Pérez de Prado, que fue víctima de un accidente el pasado mes de enero mientras realizaba una de ellas, según confirmó el propio afectado. Tras diversas reuniones, los docentes sopesan realizar sólo aquellas propuestas que no impliquen salidas del centro educativo. Pérez fue arrollado por un ciudadano británico en Andorra el 14 de enero de este año mientras participaba en una salida en la nieve junto a sus alumnos, programada por el instituto. El joven, profesor de Educación Física en el IES, sufrió diversas lesiones que requirieron dos intervenciones quirúrgicas, entre otros tratamientos, por las que continúa de baja. El afectado denunció a este periódico que la consejería de Presidencia de la Junta de Castilla y León le negó en reiteradas ocasiones asistencia jurídica para proceder por la vía legal contra la estación de esquí o la persona causante del accidente. Siempre según el propio Pérez, el claustro de profesores del IES se reunió a principios de este curso para estudiar la viabilidad de suprimir las actividades extraescolares, propuesta que quedó a la elección de cada docente y departamento. Con el paso de las semanas, el colectivo optó por programar dichas actividades, con la posibilidad de no ejecutarlas hasta comprobar la evolución del caso del compañero accidentado. En un proceso en el que llegó a intervenir el propio consejo escolar -compuesto por padres, docentes y alumnos- los profesores también dejaron la puerta abierta a la realización tan sólo de aquellos actos que no requirieran una salida del centro educativo. Donaciones de sangre Entre éstas últimas, según Pérez, podrían figurar actos de donaciones de sangre, charlas contra la droga, visitas informativas de representantes del ejército, o representaciones teatrales. El profesor aseguró que «este curso existen muchas menos actividades extraescolares porque algunos departamentos acordaron no programar ninguna». El profesorado que se mostró más reacio a participar en este tipo de propuestas elaboró un comunicado en el que acusaba a la Junta de Castilla y León de desamparar a «un profesor víctima de un accidente laboral en una actividad extraescolar» y de negarse «a aplicar su propia legislación» para estos casos. «Como resultado de ello, hemos empezado a cuestionarnos el alcance de la cobertura que nos ofrece la Administración a la hora de responder ante una posible reclamación por responsabilidad civil o, como en el caso que nos ocupa, cuando somos nosotros los que nos vemos en la situación de reclamar por los daños que hayamos podido sufrir en el desempeño de nuestra labor docente», rezaba el comunicado. Estos trabajadores, además, decían encontrarse «en una situación de incertidumbre e inquietud acerca de la falta de protección y apoyo» a Pérez, «que podemos sufrir todos ante determinadas situaciones de las que se pueden derivar responsabilidades o daños». Según indicó el afectado, parte del profesorado comunicó esta situación a otros centros de la provincia, alguno de los cuales, según su versión, resolvió no realizar actividades extraescolares. El profesor consideró éstas como «fundamentales para la formación de los alumnos, porque permiten estrechar los vínculos entre ellos y con sus educadores», indicó. El IES cuenta con un centenar de docentes y cerca de mil alumnos.