Defensa analizará el agua potable de los pueblos del campo de tiro

Defensa realizará análisis periódicos de las aguas para beber de los pueblos que utilizan captaciones situadas en el interior del campo de tiro de El Teleno, según confirmó la alcaldesa de Luyego, Marisa Rodríguez. La medida afecta a cuatro localidades de este municipio -Villalibre, Quintanilla, Luyego y Priaranza- y a dos de Lucillo -Filiel y Boisán-. Además, el Consistorio de Luyego encargó hace unos meses, tras el último incendio que permaneció activo durante varios días en el recinto militar, otro análisis de las aguas, en este caso al Instituto Geológico Minero, que ya está pagado, apuntó Rodríguez. «El agua para beber sabía a humo, y estábamos preocupados por las sustancias que pudiera contener, pero aún no conocemos los resultados», explicó la regidora. Ésta matizó que el Ayuntamiento no ha querido por el momento causar alarma en la población, alarma que, a su juicio, influiría también en el sector turístico de la comarca, hasta no tener datos concretos de las condiciones del recurso hídrico en aquellos días, «aunque la obligación del municipio es velar por la salubridad y porque el agua sea de calidad óptima», aclaró. «Un primer paso» Rodríguez explicó que «todas las captaciones (que utilizan los pueblos mencionados) se encuentran en la zona de caída de los proyectiles, y, con la excepción de la de Villalibre, el resto ya existía antes de que la zona se convirtiera en campo de tiro». La alcaldesa matizó que fueron el Consistorio de Luyego y las pedanías de Filiel y Boisán las entidades que reclamaron un análisis de las aguas por carta al ministro de Defensa, José Bono. En otro orden de cosas, Rodríguez consideró las medidas restrictivas adoptadas hace unos días por el ministerio en lo que respecta a las maniobras militares como un primer paso para el desmantelamiento del campo de tiro, al cual dijo que no renunciaría. La alcaldesa respondió así al anuncio que el secretario provincial socialista, Miguel Martínez, realizó el pasado fin de semana, respecto a que el partido no reclamaría la clausura total del polígono militar una vez conocido el acuerdo que Defensa alcanzó con cuatro de los cinco municipios afectados por estas instalaciones. «No soy una ilusa, sé que el cierre no será de hoy para mañana, pero me gustaría que se fueran acotando las prácticas para que, en un momento dado, el ejército, en vista también de los avances tecnológicos del armamento, se dé cuenta de que no merece la pena venir a tirar aquí. Entretanto cualquier avance es positivo», indicó. Una posible catástrofe La alcaldesa añadió: «Sólo una catástrofe, un accidente grave con pérdidas humanas, podría acarrear un desmantelamiento inmediato. No quisiera que tuviera que llegar», señaló. Además, aseguró que «los vecinos de la zona están muy contentos de la decisión adoptada por Defensa, porque va siendo un avance, y porque por primera vez se les ha escuchado». «Todas las captaciones se encuentran en la zona de caída de proyectiles, y, excepto la de Villalibre, el resto existía antes de que la zona se convirtiera en campo de tiro» MARISA RODRÍGUEZ Alcaldesa de Luyego