La España de la autarquía trajo el lúpulo a León

Los primeros años de la década de los 40 del pasado siglo fueron para España una época de gran escasez económica, con enormes dificultades para comprar materias primas en el exterior. Esta situación, unida a la Segunda Mundial que tenía lugar en aquellos momentos, colocaron al país en una difícil situación de abastecimiento. El sector productor de la cerveza también se vio afectado por aquella situación. La solución pasó por intentar producir en España el lúpulo, planta aromática imprescindible en la elaboración de la cerveza, de gran demanda entre la población. Después de varios intentos fallidos, en varias regiones españolas e incluso en León, el lúpulo aterriza en la comarca del Órbigo. De este momento se cumplirán próximamente los cincuenta años. De la necesidad de recibir, elaborar, transformar y almacenar este producto surge una factorí que acabó convertida en un edificio emblemático para toda la comarca. Aquellas naves entraron en servicio en el año 1955, para vivir después diversas ampliaciones y reformas en estos cincuenta años. Ahora, con su demolición, esta nave dejará lugar a una más moderna que cultivadores y empresa esperan que sea un revulsivo igual de importante al de hace cincuenta años; y que garantice la continuidad del cultivo en la provincia, lo que implicaría permitir que el nivel de renta a los cultivadores que les permita mantener la actividad.