| Reportaje | Tras el rastro del pasado |
Nuevos vestigios vadinienses
Las obras de gaseoducto dejan al descubierto una lápida en terrenos pertenecientes al pueblo de La Llama de la Guzpeña, que ha sido trasladada al Museo de León para su posterior estudio
Lápida vadiniense aparecida en La Llama de la Guzpeña
Ha aparecido una lápida vadiniense en las proximidades del pueblo de La Llama de la Guzpeña de más de cincuenta kilos de peso. El hallazgo ha sido como consecuencia del movimiento de tierras que se realizó para la canalización del gaseoducto La Robla-Guardo. La lápida aparecía semicubierta y llamó la atención a un joven francés que paseaba por la zona dado que tenía inscripciones. En la parte superior aparecen las típica inscripción vadiniense de la D y la M entre las cuales hay dibujada una hoja de edera o hiedra. En la lápida aparece el nombre de la persona que la hace y al fallecido que se le dedica, nombres que aún están por descifrar. Es del siglo II al III y se une al más de medio centenar de piedras vadinienses que han aparecido en la montaña oriental leonesa. Entre ellas destacan la de Riaño, Valdoré, Verdiago o las 14 de Crémenes, todas depositadas en el museo de León, excepto la de Riaño que está expuesta en el salón de plenos municipal. Próximo a la zona de la aparición de la lápida vadiniense hay un vallado redondo de piedra que se presupone que era de un poblado vadiniense porque cerca también se han encontrado restos de vasijas. El concejal del PP del Ayuntamiento de Prado de la Guzpeña y miembro de la junta vecinal de La Llama, Casiano Álvarez, señaló que se va a realizar una petición al Museo de León para que la lápida vadiniense sea depositada y expuesta en el Ayuntamiento de Prado de la Guzpeña.