El Centro del Cazador convertirá el municipio en referente cinegético

El Ayuntamiento de Boca de Huérgano pone en marcha la cuarta edición de la Feria de Caza, Pesca y Naturaleza Reinatur, que inaugurarán el consejero de Fomento de la Junta de Castilla y León, Antonio Silván, y el presidente de la Diputación de León, Javier García-Prieto. El alcalde de Boca de Huérgano, Tomás de la Sierra, recuerda que la feria sirve para reivindicar la importancia del parque por lo que respecta a la caza de ahí, que hoy sábado se celebre la subasta en Boca de Huérgano y mañana, en Riaño. «Esta feria trae cada año más gente, al contar en el recinto de la muestra con diversos actos como exposiciones, rutas o actividades de educación ambiental». El recinto ferial está ubicado en una carpa devidida en dos partes, en la primera, con más de cuatrocientos metros cuadrados, se encuentra toda la zona de los expositores, con la representación de empresarios de la montaña oriental leonesa. La otra zona se dedicará a la celebración de la subasta de caza, en las que se sacarán a puja un centenar de piezas. La pasada edición, la subasta alcanzó la cifra total de 130.900 euros para un total de 92 piezas. Por lo que respecta a las actuaciones de inversión municipal en materia de caza, recuerda que el torreón y su perímetro se van a convertir en un centro de atención del cazador: el centro cinegético de la reserva de Riaño y Mampodre. Todo el complejo supondrá una inversión cercana a los 700.000 euros. «A parte de este centro, el Ayuntamiento ha donado a la Consejería de Medio Ambiente una parcela en el polígono industrial para hacer una nave con cámaras frigoríficas para que los cazadores depositen los animales donde la carne se puede conservar y se prepare antes de llevársela. En este proyecto se han invertido unos 250.000 euros, cofinanciados por la Consejería de Medio Ambiente y el Ayuntamiento», manifestó De la Sierra. El parque empresarial Respecto al polígono industrial, el alcalde señala que ya hay algunas parcelas adjudicadas para la creación de pequeñas empresas. La zona industrial tiene unos 18.000 metros cuadrados y la urbanización tendrá un coste final de 190.000 euros. «Esperamos terminar todas las obras del polígono en octubre, ya que estamos a la espera de una subvención de Minas de 70.000 euros, que nos permitirá acometer la conducción de agua y la pavimentación», explicó el alcalde.