La Junta ya posee el proyecto final de las obras del museo minero

Los trabajos de rehabilitación del emblemático edificio de la Ferrería de San Blas se encuentran muy avanzados y todo indica que estarán finalizados antes del comienzo del verano, lo que ya ha motivado que, tanto la Consejería de Cultura como el Ayuntamiento, hayan dado los primeros pasos para reanudar las obras de urbanización de la plaza San Blas y la calle Enrique de Bordad, aplazadas en su día por motivos técnicos y de coincidencia con las obras de la Ferrería, y cuya inversión será de 900.00 euros. Las obras acometidas en la Ferrería en ésta última fase han consistido, principalmente, en la colocación de los marcos metálicos y cristalería en las 27 ojivas laterales de las fachadas norte y sur; el cierre con marco metálico y cristalería de las puertas de acceso al edificio, y la solera de la Lonja de Laminación. La fachada ha sido restaurada a base de material de gotegrán y, uno de los cubos de hormigón, recuperado en su estado original, volviendo a estar unido a la Ferrería. También se ha cambiado la marquetería metálica de las ventanas, antes de aluminio negro, por otras de color verde. Una vez que finalicen las obras de restauración de la Ferrería, se dotará al edificio de contenido museístico. Para ello, la Junta ya cuenta en su poder con el proyecto de Museografía definitivo que se encuentra a la espera de que sea publicado su concurso público y que ha sido valorada su inversión en 3.000 millones de euros. En la elaboración del proyecto han trabajado varios profesionales que han ido inventariando las piezas museísticas de la cuenca de Sabero, así como las de otras zonas, para su incorporación a la Lonja de Laminación de la Ferrería que, junto a las piezas reconstruidas de la época de siderurgia, se convertirán en el eje principal del museo minero. La inversión final del proyecto del Grupo Sucesiva y Altos Hornos, así como su museografía supera los 11.000.000 de euros, de los cuales ya se cuenta con 6.100.000 del antiguo plan del carbón. El resto, está pendiente del nuevo plan firmando hace escasas fechas. El arqueólogo Albert Roig Deufaleu concluyó que la maquinaria fundacional se instaló en los años 1840-1842. Ahora, serán reconstruidos a tamaño natural para poder conocer su funcionamiento. Las máquinas que se recuperarán en la Lonja de Laminación, que irán asentadas en su lugar de origen, serán la caldera y la máquina de vapor que generaba energía al cuerpo de engranajes y hacía funcionar uno de los trenes de laminado, y el martillo pilón, que estarán en la parte norte del edificio. Los restos de la Ferrería que han quedado visibles y una vez restaurados se podrán observar desde la solera de la Lonja y estarán disponibles para investigación y estudios.