Cistierna | La festividad del santo congrega cada año a cientos de personas en el entorno de la ermita
San Guillermo entre la multitud
La novedad de este año, la colocación de una nueva valla con la imagen del santo y la ermita grabadas
La festividad de San Guillermo congregó a cientos de vecinos de toda la comarca e hijos de la villa que se dieron cita en la ermita del santo. La mañana comenzó con el tradicional pasacalles a cargo de la banda de música de Cistierna y de la charanga Los Alpes del hogar del pensionista. Posteriormente, la banda salió al encuentro de la imagen del santo que en procesión recorrió las principales calles de Cistierna para continuar su recorrido por el camino que va hasta la ermita, en la falda de Peñacorada y en cuya explanada la gente esperaba la llegada de San Guillermo. Tras la celebración de la misa en la ermita, la peña San Guillermo organizó y pagó una gran paella en la plaza Amable de Dios para todos los asistentes, además de refrescos. Así mismo, la asociación de familiares de alzhéimer ofrecía roscas caseras a la gente. Este año la ermita contaba con la novedad de tener una nueva valla que aparecía grabada con la imagen del santo y de la ermita y cuyo gasto ha sido sufragado por industriales, comerciantes y vecinos, en su mayoría anónimos. La tarde continuó con un festival infantil organizado por el Ayuntamiento en la plaza Carlos Álvarez con juegos gratuitos para los todos los niños. Más tarde la banda de música ofreció un concierto en la iglesia de Cristo Rey donde deleitaron a la gente con diez piezas populares y clásicas bajo la dirección de Tamara Puertas. Las fiestas de San Guillermo concluyeron con la última verbena en la plaza del Ayuntamiento a cargo del grupo Olympus.