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Sahagún | La nueva normativa obliga a instalar en el recorrido un doble vallado del que la villa no dispone

El alcalde desoye la prohibición de la Junta de celebrar los encierros

El consistorio decide hacerse cargo de las responsabilidades que deriven y critica a PP y Guardia Civil

Publicado por
Acacio Díaz Miguel Ángel Zamora - sahagún | león
León

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José Manuel Lora, alcalde de Sahagún, decidió hacer caso omiso ayer de la prohibición de la Junta de Castilla y León por la que se ordenaba la suspensión de los encierros que abrían las fiestas de la localidad. El regidor decidió finalmente sustituir por vaquillas los novillos tradicionales en los últimos años, y que el consistorio se haga cargo de la responsabilidad que derive de los acontecimientos. El gobierno autonómico advirtió de la necesidad de cumplir el nuevo reglamento de espectáculos taurinos, que en poblaciones de más de 1.000 habitantes y para espectáculos en los que intervengan novillos, exige doble vallado en todo el recorrido urbano. La localidad no dispone de tal infraestructura, motivo por el que ahora se enfrenta a una probable sanción económica de entre 60.000 y 240.000 euros, según marca el baremo. Pleno extraordinario El alcalde convocó un Pleno urgente a primera hora de la tarde, al tener notificación del problema que se iba a presentar, y del que los concejales del PP se fueron por discrepancias. «Todo ha sido culpa de la oposición, que con tal de perjudicar al Ayuntamiento, ha sido capaz de poner sobre aviso a la Junta, en lugar de mediar ante su propio partido para que no hubiera problemas. Y no son los únicos, la Guardia Civil también se ha puesto en contra». Más quejas Las quejas de Lora se refieren a la actuación de los concejales del Partido Popular y del jefe del puesto de la Guardia Civil en Sahagún. La Junta entiende que se debe respetar el nuevo reglamento de espectáculos taurinos urbanos, puesto en marcha desde hace un año, y en el que guardará escrupulosa rigurosidad. Y la Benemérita entiende que la responsabilidad que deriva de sus nuevas competencias en estos cargos (se requería que actuase en delegación de la autoridad gubernativa) es excesiva en este caso, máxime cuando las condiciones de seguridad no estaban garantizadas.