La asociación planea ampliar sus actividades

La delegación planea trasladarse desde el antiguo colegio Leopoldo Panero en el que disfruta del uso de unos locales a un piso de alquiler, utilizando los fondos recaudados en un festival organizado hace unos meses, explicó Armesto. Con ello tendrían la posibilidad de ampliar las actividades y talleres, aunque la voluntaria matizó que para ello sería necesario previamente implicar en esta propuesta a los afectados. En este sentido, Meli González indicó que algunos de los socios tienen interés por realizar talleres de costura y de manualidades, como trabajar el barro, la cestería o hacer tapices, entre otros. Esta voluntaria animó a otros enfermos a acudir a estas sesiones. «Que vengan, que no tengan miedo. A veces unas horas de entretenimiento pueden ayudar mucho», aseguró. Además, estas actividades se combinan con los servicios de un psicólogo, que alterna la terapia de grupo con la atención individual a los enfermos y que organiza, una vez al mes, reuniones de todos los familiares de los afectados, para asesorarlos en su cuidado.