Bloques de roca caliza de más de 1.000 kilos

Con el fin de sujetar los deslizamientos superficiales en argilitas en la margen derecha de la carretera, los ingenieros proyectaron un muro de escollera hormigonada entre el kilómetro 0+117 y el 0+157. Las dimensiones de este muro de 40 m. son 3 m. de altura, 1,50 de anchura superior y 1,90 de anchura inferior. El muro de escollera hormigonada está formado por grandes bloques de roca caliza, de peso superior a 1.000 kilos y de forma más o menos prismática, de modo que el aspecto pétreo es lo más parecido posible al propio del lugar, con lo que se evitan impactos paisajísticos en la medida de lo posible. Sus principales ventajas respecto a los tradicionales muros de hormigón son un ahorro económico importante que puede superar el 30%, la adaptación a los movimientos diferenciales del terreno sin sufrir daño estructural alguno y la reducción del impacto ambiental, consecuencia de la utilización de productos naturales y de la posibilidad de introducir vegetación. El drenaje del muro se solucionó con un relleno compuesto por material granular filtrante en cuya base se ubicó un tubo ranurado que desagua a la cuneta situada en el lateral derecho de la carretera. Durante estos trabajos también se ha reforzado la escollera existente en el pie del talud entre los sectores norte y sur, en el margen derecho del río Cares, y se han colocado dos mantos de escollera entre los puntos kilométricos 0+205 y 0+240. El talud existente en la margen izquierda entre el 0+810 y el 0+840 se ha revestido mediante mampostería. Drenaje Otra de las actuaciones en el lugar ha consistido en la construcción de un drenaje transversal mediante un tubo de hormigón armado que permite el paso de las aguas bajo la carretera y la protección del talud interior en desmonte y la salida de dicha obra de drenaje con escollera. A esta obra de drenaje ubicada en el sector norte, kilómetro 0+380, llegan las aguas procedentes del canal de la cuenca que afecta a este punto del trazado, así como las de la cuneta (drenaje longitudinal), que se proyecta entre el 0+125 y 0+380, a través de un pozo rectangular de hormigón armado. Durante los trabajos se ha tenido especial cuidado en la protección de la vegetación y al finalizar los mismos se ha descompactado la superficie y se ha extendido tierra vegetal.