Grajal de Campos | Las religiosas abandonarán el convento en los próximos días
El presidente del CIT niega haber hablado de «profanar tumbas»
El Centro de Iniciativas Turísticas ha criticado los actos de las Carmelitas con el patrimonio
El presidente del Centro de Iniciativas Turísticas de Grajal de Campos (CIT), Antonio Alonso, ha desmentido por medio de un comunicado de prensa que en ningún momento haya hablado de «profanación de la tumba» de Juan de Vega, tal y como ha publicado este periódico. Según explica en el comunicado, lo que literalmente manifestó fue que se había realizado una «extracción de los restos de Juan de Vega del enterramiento que él había dispuesto en la iglesia reconstruida por él en 1595». Alonso realizó estas declaraciones en relación al tratamiento que las Hermanas Carmelitas habían dispensado a una parte del patrimonio del convento que en los próximos días abandonarán debido a las condiciones en las que se encuentra el mismo, en gran parte, debido a una plaga de termitas. Tal y como publicó este rotativo, las tablas en cuestión, según reconoció en su día la comunidad, salieron del convento hasta un paraje desconocido tras haber sido supuestamente vendidas ante la necesidad de supervivencia a la que se vio sometida la comunidad. Así, el presidente del CIT de Grajal recordó recientemente que las tablas protegieron en su día los restos mortales de Juan de Vega, primer conde de Grajal. Por su parte, la religiosas respondieron por medio de otra nota de prensa que «lamentan» la decisión de tener que abandonar la localidad para desplazarse previsiblemente a Toledo. Aún así, han recordado que hace ya cuatro años recibieron la advertencia de un biólogo de que el edificio se encontraba en ruina debido a las condiciones que presentaba y también por la aparición de las termitas. Además, las Hermanas Carmelitas aseguran que no sabían que tendrían que irse ya que, de haberlo sabido, no hubieran realizado ninguna inversión en las instalaciones y que, si se realizaron, fue por su voluntad de mantenerse en la comarca. La decisión de no haber aceptado ayudas de la Junta de Castilla y León para su rehabilitación la basan en el hecho de que el monasterio es de Clausura Papal, por lo que nadie puede entrar o salir de él sin que lo autorice el Obispado. Antonio Alonso recuerda en su comunicado que es el presidente del CIT de Grajal de Campos, y no el de Sahagún.