«Se debería cuidar y mimar más al pimiento de Fresno»

Eliseo Morán, o Eli como es más conocido, es uno de los productores de hortalizas y pimientos de Fresno de esta localidad que este fin de semana celebra su XXIII Feria del Pimiento Morrón. Lleva «toda la vida, desde que era muy pequeño» dedicado a la horticultura. Posee una finca de tres hectáreas de extensión, de las que alrededor de 7.000 metros cuadrados están dedicados a pimientos, con un total de más de 50.000 plantas -¿Cómo es la cosecha de este año? -Muchos pimientos fueron dañados por las tres tormentas, con dos semanas exactas de diferencia entre ellas, que hemos sufrido este verano. La piedra ha hecho mucho daño, en mi caso, he perdido alrededor del 75% de la producción de pimientos. De la primera granizada se recuperaron las plantas bastante bien, pero de las otras dos tormentas no. Además de los pimientos, también afectó a otras hortalizas como acelgas o espinacas. -¿Cuál es el secreto para conseguir un buen pimiento morrón? - Yo creo que no hay ninguno, sólo la tradición que pasa de padres a hijos, el terreno y el clima único de Fresno. El terreno es tan importante que a veces hay diferencias, incluso, de una tierra a otra. -¿Cómo es este tipo de pimientos? -Se denomina morrón por su forma de morro. En cuanto al cuidado que requiere, es un pimiento difícil de producir, muy pocos años se dan las condiciones ideales para su producción. Además es un producto muy delicado, cualquier pequeño roce al arrancarlos de la planta, transportarlos o colocarlos en cajas deja marcado el pimiento. -¿En qué ha cambiado la producción a través de los años? -Antes todo se hacía a mano y con animales, ahora se utilizan tractores. En cuanto al riego, ahora es por goteo, antes se hacía con noria y motor. -¿El futuro del pimiento morrón de Fresno? -Tiene el mismo problema que el resto del campo, que no hay productores, los jóvenes no se quieren dedicar a esto. Otro de los problemas de nuestros pimientos es, desde mi punto de vista, que no se les cuida lo suficiente; igual que las frutas delicadas se colocan en cajas de una en una y separadas, se debería hacer con estos pimientos. Los cambios que ha habido en la producción no han ido aparejados con cambios en el sistema de venta, deberíamos mimar más al pimiento morrón. Se deberían buscar otros mercados, antes vendíamos a Asturias y Galicia, estos mercados se han abandonado ahora por el mal sistema de comercialización. Incluso en 1971, cuando nació la cooperativa, tuvimos la oportunidad de exportarlos a Alemania, teníamos una empresa dispuesta a comprarlos y llevarlos allí pero, como no había ni producción ni gente comprometida, no se pudo llevar a cabo. El pimiento morrón es un pimiento muy bonito que, en fresco, atrae mucho al público.