El vehículo fue interceptado cerca de Sahechores con ayuda de los agentes del puesto de Gradefes
La Guardia Civil detiene al furtivo que abatió un ciervo de 150 kilos
Lo llevaba en el maletero de su automóvil y presentaba varios impactos de bala de rifle
Agentes de la Guardia Civil de Almanza detuvieron el pasado sábado a J.R.A.P., de 46 años de edad y vecino de la localidad asturiana de Mieres, que portaba en el maletero de su vehículo un ciervo macho muerto. Los hechos ocurrieron a las dos de la madrugada, cuando los agentes, que se encontraban en el kilómetro 16 de la carretera LE-231 en Almanza, realizando un control preventivo de seguridad ciudadana observaron que un vehículo aminoraba anormalmente la velocidad, por lo que procedieron a darle el alto para identificar a su conductor y a los tres varones que viajaban en su interior. Mientras uno de los agentes solicitaba la documentación, el otro realizaba una inspección superficial del vehículo pudiendo observar que en la parte de atrás había un bulto de grandes dimensiones cubierto con un plástico negro por uno de cuyos extremos asomaba lo que parecía ser el asta de un animal. Se solicitó al conductor que abriera el maletero momento en el que éste, en un estado de nerviosismo, se dio rápidamente a la fuga, «provocando un importante riesgo para la seguridad del agente que en ese momento estaba comprobando la documentación y que se vio obligado a realizar un movimiento evasivo para no ser atropellado», según señala fuentes de la Subdelegación del Gobierno. A partir de este momento se realizó una persecución en la que se pudo comprobar que el vehículo hacía dos parada sin determinar el motivo dada la oscuridad y la distancia que sacaba al coche de la patrulla de la Guardia Civil de Almanza. Con ayuda de agentes de la Guardia Civil de Gradefes se pudo interceptar al vehículo en las proximidades de Sahechores y comprobar que en su interior viajaban ya sólo dos personas, dado que los otros dos se habían bajado en las dos paradas realizadas. El conductor fue detenido por delitos contra la seguridad del tráfico y desobediencia a los agentes. Además, al comprobar que portaban un ciervo macho de unos 150 kilos con varios impactos de bala de rifle, se le impuso otro delito relativo a la protección de la fauna, pasando a disposición de juez en el juzgado de Sahagún. La caza furtiva es habitual en la zona y muchos son los vecinos de Almanza y pueblos limítrofes que denuncian su malestar dado que apuntan que es habitual oír por la noche los continuos disparos. Además, algunos pudieron comprobar cómo se producía la persecución al ver el vehículo cruzar a toda velocidad por Almanza.