De los mil seiscientos jóvenes empadronados, 138 varones y 116 mujeres sufren de obesidad
El 16% de los niños del municipio tienen sobrepeso, según un estudio
El porcentaje ya supera en un punto al de los adultos, cuya tasa está cifrada en el 15,3%
De los 1.662 niños de cero a 16 años dados de alta en el padrón municipal de habitantes en Astorga, son obesos o padecen sobrepeso un total de 254 -138 niños y 116 niñas-, según datos facilitados por la concejala de Servicios Sociales y procuradora, Victorina Alonso, del PSOE. La edil alertó sobre los efectos de un problema creciente, y señaló que esta patología tiene una incidencia tres veces mayor que hace veinte años en el municipio. La tasa de obesidad infantil en Astorga se sitúa en el 16,1%, frente al 15,3% de adultos que padecen dicho trastorno. La media de obesidad supera en el municipio el índice nacional: 15,3% frente a 13,9%, apuntó la edil. Alonso indicó que la obesidad «puede acortar la vida, que es de una media de 85 años para las mujeres y de 78 para los hombres, en diez años, con más incidencia si la persona sufre esta enfermedad desde la infancia». Añadió que el gasto en medicamentos de una persona con sobrepeso es un 77% más elevado que el de otra que está en su peso normal porque este trastorno «va asociado a enfermedades cardiovasculares, gota, diabetes, hipertensión, etc», alguna de las cuales, matizó, ya está apareciendo en niños y jóvenes obesos. Además, Alonso calculó que el 12,5% de la nutrición infantil se realiza en los comedores de los colegios. «Los alumnos habitualmente comen en los centros, aunque algunos, como los de las guarderías, también meriendan, y otros, desayunan», dijo. Ocho colegios y dos guarderías La ciudad dispone de ocho colegios y dos guarderías, públicos y privados. Alonso indicó que los niños hacen, al menos, un tercio de las comidas principales en los centros, y que esta tendencia va en aumento, aparejada a la ampliación del horario escolar. «Esto es muy importante porque desde ellos se les puede educar. En general, la comida en los colegios de la comunidad es muy grasa, muy calórica y excesivamente rica en carne», indicó. Además, estimó que si los niños aprenden a alimentarse correctamente en los centros educativos pueden orientar a sus familias sobre cómo deben hacerlo en sus casas. La edil apuntó que si los valores resultantes de dividir la talla de un niño en metros cuadrados por su peso en kilos están por encima de 75 o de 90, el pequeño, respectivamente, padece sobrepeso o es obeso.