Un centro de interpretación

Ribera del Ornia quiere que su bodega sea algo más que el lugar en el que fermentan y se embotellan sus vinos, motivo por el que la instalación presenta una arquitectura que recuerda a la que se ha seguido tradicionalmente. Inicio o fin de ruta Según explicó el director de la bodega, Bernabé Alonso, la bodega quiere ser principio o fin de una ruta turística enológica, en la que la instalación se convierta en un centro de interpretación del vino «desde la tierra a la copa», explicó el directivo. El visitante encontrará al llegar a la bodega, aún en el exterior, los distintos tipos de cepas que se dan en el mundo, así como viejos aperos y una antigua prensa. En el vestíbulo de las instalaciones, podrá ver un audiovisual, así como paneles informativos tanto de la elaboración del vino como de la comarca o el sistema de control de calidad. Gastronomía En la bodega ya hay una zona destinada a las catas técnicas que realizarán los visitantes, a los que se introducirá en la evaluación de los caldos, según la técnica de los catadores, y, para aquellas visitas que así lo concierten, se servirá una comida, con platos típicos.