Los técnicos sacan a la luz nuevas escenas de las pinturas góticas

Las catas realizadas en la primera intervención en las pinturas góticas de Cebrones del Río revelaban la existencia de nuevas escenas que completaban el conjunto, descubierto por casualidad, en la cabecera de la vieja iglesia de San Esteban, en Cebrones del Río. Sin embargo, hasta que no ha comenzado la segunda fase de la recuperación de las pinturas, hace ahora un mes, no se ha conocido su contenido. Unas escenas que aún deben interpretarse para dotarlas de todo su significado. Las pinturas que se encontraron al retirar el retablo para demoler la vieja iglesia y construir una nueva narraban la pasión de Cristo, si bien el tema central era un pantocrátor, flanqueado por San Esteban y San Lorenzo. Ahora, tras varias semanas eliminando el encalado, el equipo de especialistas de la empresa Restaurolid Ibérica, S.L., a la que la Junta de Castilla y León ha confiado las dos fases realizadas en Cebrones hasta el momento, ha sacado a la luz escena de la infancia de Jesús -la matanza de los Santos Inocentes y la huida a Egipto- e imágenes de mártires. De momento está identificada Santa Lucía, que muestra sus ojos en un plato y sostiene en la otra mano la palma del martirio, y parece ser que otra de las bienaventuradas sería Santa Apolonia, por las tenazas que sujeta con una mano, instrumento que se utilizó para arrancarle los dientes. Los daños Sin embargo, aún no se ha eliminado todo el mortero que cubría las paredes laterales y todavía pueden surgir nuevas escenas. Los restauradores están encontrando especiales dificultades en el muro de la derecha, si se mira hacia las imágenes ya restauradas. En esta zona, donde se han encontrado las figuras de las mártires, la pared ha sufrido especialmente: al encontrarse junto al cementerio de la localidad, la humedad ha sido uno de los principales problemas para la conservación de los frescos. Además, la apertura aquí de una ventana y de una puerta ha contribuido a la desaparición de registros. Otra puerta al otro lado también supuso un perjuicio para los murales. Además, aquí se había realizado una cata para introducir la instalación eléctrica. A ambos lados, las pinturas murales presentan daños por el picado que se realizó para que agarrase el encalado que se aplicó a las paredes. Además, con el transcurso del tiempo se han aplicado varias capas de mortero para arreglar unas paredes engalanadas por una obra de arte que se desechó en su momento. En los próximos cinco meses, el equipo de Restaurolid Ibérica no sólo eliminará el mortero que aún queda, sino que limpiará las pinturas para recuperar los colores y consolidarlas en aquellos puntos en los que, por la humedad, se han formado abombamientos, como actuaciones fundamentales.