La vía ferroviaria se utilizará como ruta turística con dos ciclo-raíles

El alcalde de La Bañeza, José Miguel Palazuelo, y el pedáneo de Altobar de la encomienda y concejal en Roperuelos del Páramo, José Antonio Cartón, presentaron ayer a los medios de comunicación un proyecto para convertir la vieja línea del ferrocarril de la Vía de la Plata en una ruta turística entre ambas localidades que utilizará el trazado ferroviario como vía verde. En concreto, la inversión prevista en una primera fase de un proyecto que se ha gestado en Altobar asciende a 217.000 euros para un recorrido de 20 kilómetros, en los que se instalarán dos ciclo-raíles. Estos dispositivos permiten enganchar utilizar la vía para transitar en bicicleta y cuentan con la ventaja de que el usuario puede decidir abandonar la vía para acercarse «a lugares como Villanueva de Jamuz, Quintana y Congosto o Alija del Infantado, para visitar su patrimonio», señaló Palazuelo, que manifestó la intención de los promotores de implicar a todos los ayuntamientos afectados en este trazado, como Santa Elena de Jamuz, Quintana del Marco, Roperuelos o Cebrones. Por otra parte, una capa de zahorra en el centro de la vía permitirá utilizar el itinerario a pie o con bicicleta, pero sin utilizar el ciclo-raíl, artilugio que ya se emplea «en la montaña palentina, con éxito», según Cartón. Por otra parte, el proyecto cuenta con la ventaja de que el trazado «se puede utilizar en caso de reapertura de la línea». Dos empleados El pedáneo de Altobar explicó que la vía verde «impulsa el desarrollo sostenible de la comarca, al generar empleo y acercar a las gentes de la comarca y los visitantes su patrimonio cultural, además de favorecer un modo de vida sano». A lo largo del recorrido se instalarán paneles informativos sobre los puntos de interés del trayecto o cercanos a éste, se limpiará la vía y sus márgenes se prestará especial atención a puentes y otros pasos en los que sea necesario instalar medidas de seguridad para evitar la caída de los usuarios. La casa del Fielato, en La Bañeza, será origen y final de trayecto, mientras que en Altobar habrá que habilitar un local. En principio, dos personas se harían cargo de prestar este servicio, una por punto de salida-llegada, que se utilizará de forma gratuita y mediante reserva.