El piloto de Alija que falleció en Kenia «tenía experiencia de vuelo»

Óliver Pérez Pérez, el piloto de aviación civil que falleció al estrellarse la avioneta en la que viajaba el pasado sábado, «tenía experiencia de vuelo», según manifestó ayer su padre, José Luis Pérez Pérez, que se encontraba ayer en Madrid a la espera de la repatriación de los restos mortales de su hijo, de 29 años, que perdió la vida el sábado en Kenia. Según explicaron ayer por la tarde fuentes de la familia, si no se produjeran contratiempos, el vuelo con el féretro del piloto alixano partió a las once de la noche de ayer, hora española, de Nairobi. Se espera que, tras aterrizar en Barajas, la comitiva fúnebre llega a Alija sobre las siete de la tarde de hoy. La misa-funeral por el alma del piloto se celebrará mañana miércoles, a las doce del mediodía, en la Parroquia de san Verísimo. José Luis Pérez no se explicaba ayer lo que podía haber sucedido a su hijo. Según explicó «disponía de la licencia para pilotar avionetas privadas a los 17 años, antes de sacar el carné de conducir» y, tras formarse como piloto civil en Salamanca, consiguió el título de instructor de vuelo, labor que desempeñó en Madrid y Tenerife. Trabajó en Estados Unidos como piloto y, en la actualidad, prestaba sus servicios en Jets Personales, S.A. «A los 22 años pilotaba Boeing 737, el avión más comercial», explicaba ayer José Luis Pérez. Según el padre del piloto, éste había viajado a Kenia pilotando uno de los aparatos de su compañía, para desplazar hasta el país africano al empresario Alberto Cortina. «El avión llegó bien a Kenia», señaló. Fue después, «cuando fueron a ver unas panorámicas del país», cuando sucedió el siniestro, en el que Óliver Pérez, que viajaba en una avioneta, iba acompañado por otro piloto, de nacionalidad francesa. José Luis Pérez manifestó que desconoce las causas del siniestro y el lugar del país en el que éste se produjo. Un hermano del fallecido y una compañera de éste viajaron ayer a Kenia para tramitar la repatriación del piloto.