No es una vaca cualquiera
La granja Jorzaima de Joarilla de las Matas tiene entre sus 260 cabezas a la primera productora de leche de España, con más de 16.600 litros en 305 días de ordeño
Genética, manejo y alimentación. No hay más secretos con la vaca número 138 de la explotación Jorzaima SL, asentada en Joarilla de las Matas, que lidera el ránking de producción lechera de calidad que valora anualmente la organización Conafe (Confederación de Asociaciones de Frisona Española). Jorge Álvarez Gago tiene la primera vaca de España en la categoría de segunda lactación (o gestación o parto) con una marca que asombra: en 305 días de ordeño produjo 16.672 litros de leche, que acompaña con un registro de 1.371 kilos de grasa y proteína. Este es el matiz que convierte en campeona a Cuvi Emmala, que así se la distinguía en la carta genealógica que la acompañó de Holanda hasta León. La reseña de la distinción en la revista Frisona, luego relatada por el sindicato Asaja, al que está afiliado este ganadero leonés, convirtió ayer la granja de Joarilla en un punto de referencia informativo. Álvarez Gago se lo tomó con amplias dosis de modestia, alejado de cualquier implicación en el registro productivo del animal. La realidad, sin embargo, le contradice: Cuvi Emmala, en adelante animal número 138 de la explotación, fue captada en un ojeo de este ganadero leonés en Holanda, a donde acudió para seleccionar ganado y reponer la granja de los efectos de la Encefalopatía Espongiforme Bovina. El detalle, lejos de ser nimio, engrandece la marca que ha logrado la explotación en la última valoración de Conafe. La evolución de Jorzaima, a donde llegó la campeona frisona con 23 meses, tiene mucha similitud con la descripción de una gesta. En el año 2002, cuando aún se estilaba criminalizar a los propietarios de una granja afectada por un caso positivo de vaca loca, la explotación de Joarilla de las Matas sacrificó 230 cabezas tras registrar un positivo de encefalopatía. Jorge Álvarez Gago se pasó 15 días en Alemania y 7 en Holanda para regenerar el proyecto. Allí mostró sus dotes para elegir, y escoger bien. Lo recuerda también con modestia. «Elegí 130 animales entre cinco o seis mil novillas que vimos en Alemania y Holanda; así recompusimos la explotación para volver a empezar, con los mejores animales que ví». Entre la mercancía llegó la 138, hoy de actualidad por la facultad genética de producir leche con una riqueza proteica por encima de la media, algo que deja en buen lugar el talento del dueño de Jorzaima para seleccionar ganado. «Fue la penúltima novilla que compré en Holanda», rememora. Ajeno al protagonismo, Álvarez Gago accedió a acentuar las facultades del animal que es capaz de sacar una media de 55 litros por jornada durante trescientos días. «Enfoquen a las venas de las ubres, a las patas», aconsejó a los cámaras de televisión que acudieron a su granja para definir con certeza las cualidades morfológicas de la vaca. «Yo puedo mejorar el nivel de grasa de la leche con la alimentación; pero la proteína sólo depende de la genética», reconoce. La teoría se antoja cierta en una granja que clasifica media docena de vacas más entre las cien productoras de más calidad. La industria que recoge la leche a Jorzaima, que paga o penaliza en los precios en función de calidad, también corrobora la tesis de que la proteína nace con la vaca, en una línea genética que ampara a la cabeza 138, antes Cuvi Emmala.