Diario de León

En Caracolia se les cae la baba

La granja de caracoles de Calzada del Coto recibe tan ingente demanda este año que su propietario no puede garantizar que se cubra lo que necesita la comarca en el 2007

Aspecto que presentaba en las últimas fechas la granja de caracoles de Calzada del Coto

Aspecto que presentaba en las últimas fechas la granja de caracoles de Calzada del Coto

Publicado por
Acacio Díaz - corresponsal | sahagún
León

Creado:

Actualizado:

El proyecto había arrancado en el año 2005. «La nevada de enero del 2006 nos destrozó las instalaciones, hubo que volver a montarlo todo, y entre el tiempo que perdimos y los daños que nos causó, la temporada la dimos por perdida». Este año, la campaña se ha renovado con tales bríos que, a fecha de hoy, hay dudas de que se puedahacer frente a la producción que demanda la comarca. «Sólo durante las Jornadas Gastronómicas, vendimos 50 kilos de caracoles». Alberto Castañeda, propietario de la granja de caracoles de Calzada del Coto, está especialmente satisfecho de lo que está sucediendo este año. «Los primero caracoles se introdujeron en el los meses de mayo y junio y las crías no han tenido tiempo suficiente de alcanzar el tamaño óptimo para la venta. Solo los más precoces han logrado llegar al peso adecuado, necesitan un año para lograr el peso». Pero, aunque el volumen de ventas ha sido relativamente pequeño han causado buena impresión: «La gente que ha hablado conmigo ha quedado satisfecha con los caracoles que comieron en las jornadas gastronómicas. También las manos del cocinero habrán contribuido a crear un caracol sabroso», manifiesta. Llega la época típica de cocinar los caracoles, y la demanda de la comarca es notable. «Nos piden hasta de Palencia, pero este año no va a ser posible, aunque saber que contamos con la confianza de la gente, ya es mucho». Las diferencias entre los ejemplares que se ofrecen en Caracolia y los habituales de recogida en el campo, son notables: «La granja es un espacio libre de pesticidas. Además se venden lavados y correctamente envasados en mallas. El tamaño es uniforme entre todos los ejemplares, la concha se presenta mucho más resistente y evita la rotura durante el lavado y cocinado del caracol, y por lo tanto la salsa está ausente de restos que pueden ser incómodos a la hora de disfrutar del plato», explica Castañeda. De lo que no tiene duda alguna es de que tienen mejor sabor: «Los caracoles de granja comen vegetales adecuados (plantas de huerta como acelgas, berzas, rábano, alcachofa...), no cualquier planta, además de piensos a base de semillas molidas. Por lo tanto no tienen sabores amargos». Un dato clave. Resolver las dudas Alberto se dedica ultimamente a resolver también las dudas de los vecinos de la zona. «Desde que ehemos puesto en marcha el proyecto, los vecinos de todos estos pueblos de los alrededores vienen a preguntarnos sus dudas, porque a todo el mundo le gusta cocinar los mejores caracoles posibles», explica el propietario de tan particular granja, que hace votos para que en un futuro cercano, se pueda consolidar la iniciativa.

tracking