| Reportaje | Bercianos del Real Camino, de fiesta |
A la gloria de la Virgen
La Romería de Perales se convierte un año más en un verdadero espejo de los mejores pendones de la provincia, con presencia de al menos una veintena de los más selectos ejemplares de la provin
Los pendones hicieron los honores a la Virgen de Perales, como manda la tradición
Pendones procedentes de diferentes puntos de la provincia de León rindieron este fin de semana homenaje a la Virgen de Perales, en la tradicional romería, acompañados de cientos de vecinos de la comarca, deseosos de cumplir con el rito anual. Veinte ejemplares de esta típica muestra de la cultura leonesa. Transcurrido un mes desde que la patrona fue trasladada a la ermita de San Roque, allá por el último domingo de abril, la Virgen hizo su entrada en la ermita que preside y protagonizó los actos del novenario más concurrido que se ha recordado en los últimos tiempos. La mañana amaneció un tanto gris, pero sin viento, circunstancia que colaboró a la hora de realizar el traslado de los diversos pendones que compusieron el trayecto. A lo largo de los dos kilómetros que componen el recorrido que cada año siguen los elementos, las dulzainas y los tamboriles llenaron de sonidos los quehaceres de los fieles que acudieron a la ermita, bajo la organización de la Asociación de Pendones del Reino de León. La mies, que promete este año una cosecha excelente, se fue cimbreando al paso de los romeros, aclamando a la patrona y desrrollando un excelente trabajo a lo largo de todo el cortejo. En su recorrido, los romeros que acudían camino de Santiago de Compostela admiraron los colores que se exhibieron enhiestos a la o largo de toda la jornada, portagonistas de un viaje en el que el pueblo quiere estar siempre presente. Una paellada gratuita puso el cierre a las actividades en esta oportunidad, para deleite de los asistentes.