El alcalde teme que el paso suponga un embudo en la LE-451 una vez mejorada
El Ayuntamiento reclama una solución para el puente de Sopeña
Las obras del vial comenzaron hace meses y Llamas dice desconocer qué plantea la Junta
Vista del puente de hierro de Sopeña sobre la carretera de Pandorado en una imagen de archivo
El alcalde en funciones de Villaobispo de Otero, Joaquín Llamas, reclamó a la Junta de Castilla y León una solución urgente al puente de hierro de Sopeña, en el marco de las obras de acondicionamiento, ya en curso, de la LE-451, la carretera de Pandorado. «Si los trabajos terminan este año, como anunció la Administración autonómica, es precisa alguna medida que frene el tráfico antes de llegar a él», apuntó Llamas. Éste recordó que, debido a la estrechez de este paso, «que se produce de modo repentino y tras un cambio de rasante», la zona ya ha sido objeto de varios accidentes de trafico, y estimó que esta situación podría agravarse cuando la mejora de la LE-451 derive en que los conductores circulen por la zona a mayor velocidad. Cabe recordar que el proyecto inicial para el acondicionamiento del vial contemplaba el derribo del puente, aunque finalmente, tras las protestas ejercidas por varios movimientos de tipo intelectual vinculados a la comarca, que consideraban que su diseño ligado al despegue industrial de comienzos del siglo XX lo hacían merecedor de ser conservado, las Cortes de Castilla y León aprobaron una propuesta del grupo socialista para preservar el paso sobre el Tuerto. Llamas anunció que la petición de una solución a este problema será el primer punto del orden del día del primer pleno que el municipio celebre tras la constitución de la nueva corporación. «Es una dificultad grande que le quedaría al ayuntamiento y la comarca», dijo. Última visita El regidor en funciones apuntó que durante la última visita del consejero de Fomento, Antonio Silván, a la Cepeda, a comienzos del mes de mayo, éste le había comunicado «que este asunto está en estudio, para saber cómo se integraría el nuevo puente, pero la solución no termina de llegar», dijo. Llamas planteó como alternativa el traslado del puente de hierro a un entorno como la playa fluvial de Sopeña «en el que no será utilizado por los vehículos», y su sustitución por uno nuevo. Además, indicó que «según observaciones de los técnicos implicados en el proyecto, la creación de un paso paralelo al actual puede afectar a las últimas casas del pueblo, porque habría que desplazar el trazado de la carretera contra ellas», apuntó. En cualquier caso, el regidor en funciones pidió a la Junta «que realice los correspondientes informes técnicos y respete el acuerdo que tomó» en referencia al viaducto.