«La Ruta Romana fue un empeño personal»

-La recuperación de las murallas ¿es el gran asunto pendiente de la ciudad? -Sí, tenemos otro reto: las subvenciones patrimoniales en un futuro próximo, si no iniciadas, al menos conseguidas en una primera fase, deben ir encaminadas a ello. Requerirá mucho dinero y años, pero. como tantas cosas, es proponerse unos objetivos y paso a paso ir consiguiéndolos. Si el Ayuntamiento deriva ahí su esfuerzo puede tener ayuda de la Junta y del Ministerio de Cultura. -¿Cuándo terminará el complejo Lyda y cómo se plantea el Ayuntamiento su gestión? -Una vez que la maquinaria administrativa comenzó a funcionar, deberíamos ver, si no terminadas, a punto de terminarse las obras, en esta legislatura. La gestión no será complicada, porque la biblioteca y el teatro ya están en uso. Sí sería conveniente que el área de congresos corriese a cargo del patronato de turismo que queremos crear. Hay que potenciar la gestión del área turística, la oficina, restos arqueológicos, museos, acudir a ferias,..., con medios sobre todo humanos. -¿Ha consultado ya la posibilidad de contar con la Casa Real para inaugurar el patrimonio arqueológico? -La Ruta Romana es, si se me permite, un empeño personal contra corriente. Me costó muchísimo, es una labor gigantesca, se han movido decenas de tonelada, palmo a palmo, de la tierra de la ciudad. Ha habido un rescate del patrimonio romano y ahora una labor de acondicionamiento de estos restos. Es un complemento tan fuerte para el prestigio de Astorga y su economía que merecería un reconocimiento institucional grande, también para que los astorganos fueran conscientes de él. Ya se lo planteé al príncipe Felipe cuando vino a la ciudad.