La farsa continúa
EN ESTA VIDA hay cosas que por mucho que te las expliquen no terminas de entenderlas. Hay frases hechas que, de tan manidas como están llegamos a pensar que son verdad. Una de ellas es que ante la ley todos somos iguales: altos y bajos, rubios y morenos, gordos y flacos, ricos y pobres, pero luego, desgraciadamente podemos comprobar que las leyes siempre acaban poniéndose al lado del poderoso y en contra, en algunas ocasiones del sentido común. Así vemos como continúa la comedia de El Feixolín, que sino fuera porque todos los encausados están riéndose descaradamente del pueblo lacianiego, sería para que figurara en los anales del sinsentido. Veamos, una mina a cielo abierto que viene funcionando desde hace 12 años sin licencia ambiental ni urbanística, dentro de un terreno protegido, que amén de otro tipo de protecciones medioambientales, goza de ser Reserva de la Biosfera de la Unesco, todo ello, sin que ninguna de las administraciones pertinentes se haya sentido obligada a hacer cumplir las leyes, llegando al extremo de que ha tenido que ser un juez quien dicte sentencia de cierre. Sentencia que, por cierto ha durado cuatro días, pues a las mil y una trabas burocráticas existentes, se unen las ilegales presiones ejercidas desde la empresa minera, llegándose al momento actual donde no sabemos si han servido para algo las actuaciones judiciales en defensa y exigencia de que se cumpla la ley. Seguros estamos, que si detrás de la paralización no se encontrara una persona ajena a los tejemanejes de los políticos locales, provinciales, comunitarios y nacionales, la explotación habría seguido funcionando hasta el momento como si nada. Pero las presiones ejercidas por el empresario lacianiego Arias Tronco en defensa de sus legítimos intereses han sido prácticamente la única traba que ha tenido la MSP para continuar funcionando. No se puede comprender que aquellas personas a las que democráticamente elegimos para que defiendan nuestros intereses, cuando alguien trata de saltarse las leyes a la torera, se olviden al día siguiente de que su principal obligación es esa. Si la situación de la explotación de la corta de El Feixolín es ilegal desde sus comienzos, hace ya 12 años, se supone que desde el Ayuntamiento de Villablino hasta el Ministerio de Medio Ambiente tendrán responsabilidades a las que hacer frente. De nada sirve que escondan la cabeza bajo el ala y de que se admitan los chantajes que desde la empresa se plantean, tales como despidos masivos de trabajadores, retrasos en los pagos de las nóminas... Admitir todas estas tropelías dice poco a favor de aquellos que deben de ser nuestros principales defensores... Y menos aún la amenaza por parte de la Junta de Castilla y León de que se concederán futuros permisos de ampliación a estas ilegales explotaciones de manera inminente. ¿Pero en que cabeza cabe el pensar que todo se arregla aplaudiendo y consintiendo al que obra fuera de las leyes? Desde las administraciones se debe de analizar el problema en profundidad. ¿O queremos que en Laciana continúe mandando la sinrazón de MSP y sus tropelías o queremos que el valle tenga algún futuro ya?