A pesar del decreto de paralización los operarios comenzaron a colocar las torretas
El alcalde denuncia a la adjudicataria de la línea por comenzar las obras
El Ayuntamiento ha exigido a la Junta de Castilla y León toda la documentación respecto al proyecto
Se han empezado a colocar las primeras torretas cuyos trabajos han sido denunciados
El alcalde de Cubillas de Rueda, Miguel Díez, ha denunciado ante la Guardia Civil de Gradefes el inicio de las obras de la línea de alta tensión de la Junta de Castilla y León y que tienen por objetivo el suministro de energía eléctrica para las estaciones de bombeo de parte de la zona regable del canal de Payuelos. Esta línea transcurrirá, de forma aérea, cercana al casco urbano de Sahechores de Rueda lo que desde hace muchos meses ha provocado el rechazo de los vecinos que exigen su soterramiento. El lunes, el alcalde de Cubillas de Rueda presentó un decreto alcaldía para la paralización de las obras ante la Junta de Castilla y León, el Instituto Técnico Agrario de Castilla y León, encargada de la redacción de proyecto y la empresa Isolux Ingeniaría adjudicataria de colocación de las torretas. Miguel Díez se personó en el lugar en el que se estaban colocando las torretas exigiendo que se paralizasen las obras dado que existía un decreto de paralización. Ante la negativa de la empresa presentó una denuncia en el cuartel de la Guardia Civil de Gradefes por desobediencia a la orden de paralización municipal y a la autoridad competente que en esta caso es el Ayuntamiento y su alcalde. El máximo responsable municipal demandaba a la Junta de Castilla y león la presentación en el Ayuntamiento de Cubillas del proyecto de la línea de alta tensión de 132 kilovoltios, la declaración de impacto ambiental del proyecto, la autorización del órgano competente para la construcción de la línea, la solicitud al Ayuntamiento de la licencia ambiental y la solicitud de autorización de usos excepcionales en suelo rústico. Mientras estas documentaciones no se han presentadas en el Ayuntamiento de Cubillas se ha propuesto la suspensión de las obras «a vista de los posibles perjuicios que pueda suponer el inicio de las obras sin contar con los permisos y autorizaciones legalmente exigibles», según recuerda Díez en su decreto que otorga a los responsables del proyecto un plazo de quince días para presentar alegaciones. A pesar de que las obras se iniciaron el martes, en la tarde de ayer miércoles parecía que se habían suspendidos después de que se colocase parte de una de las torretas.