El ataque de un oso a un colmenar provoca pérdidas de 600 euros

Juan Carlos Rodríguez Barreiro, un vecino de Villablino y vocal de la Asociación de Apicultores de León, vio como el pasado fin de semana sus colmenas volvieron a ser atacadas por un oso. El suceso ocurrió en Cuevas del Sil, concretamente en la carretera de Tejedo, donde este vecino tiene sus colmenas. Rodríguez Barreiro cuenta con un total de 49 colmenas, de las cuales tres se vieron afectadas por el ataque del oso, aunque anteriormente, en el mes de mayo otras cinco colmenas habían sido atacadas. «He perdido alrededor de cien euros, más los beneficios de la venta de miel que suman otros cien euros, un total de dos cientos euros», comenta. En este sentido, el coste de los daños ocasionados se eleva a seis cientos euros al contar las tres colmenas que sufrieron el ataque del oso, si a esto se le suma el dinero que perdió con las otras cinco colmenas, la suma se eleva a 1.600 euros. El vecino menciona que la finca estaba cerrada con alambre y no tenía pastor eléctrico, ya que lo quitó para regar y no lo volvió a poner. Según este hombre, no es obligatorio tenerlo y menciona que «nadie puede reprochar que no tuviera pastor». Juan Carlos Rodríguez Barreiro asegura que la Fundación Oso Pardo, que se encarga de todo aquello que se relacione con este animal y con los daños que pueda ocasionar, «no está realizando un buen trabajo». Las ayudas, más rápido Además, señala que el pastor eléctrico debería cederlo la fundación. El vecino de Villablino destaca que los daños se pagan bastante tarde: «Van a tardar un año en pagarme los daños, pero ahora ya está hecho y no me dan soluciones». Según Juan Carlos Rodríguez, él no es el único afectado por el ataque del oso a las colmenas, ya que también actuó en otros pueblos de la zona como Matalavilla, Sosas o Palacios. Este hombre que llevaba perdidas ocho colmenas cree que una solución sería tener pastor eléctrico «cedido por la Fundación Oso Pardo y que cuando pase una situación como la mía se pagasen los daños más pronto». Además, el vecino apunta que, de momento, nadie da soluciones «y las personas en este tipo de situaciones necesitan ayudas para poder continuar».