Unas curiosas bodas de oro

Santiago de la Valduerna cumplió ayer 50 años con esta denominación, desde que en 1957 cambiara su nombre, Sacaojos, como se llamó desde tiempos inmemoriales, por el actual. La localidad celebró este acontecimiento con una misa solemne dedicada al patrón Santiago, en la que el párroco, José Luis Santos, recordó tan importante aniversario a los asistentes. Entre ellos se encontraban la concejala de Servicios Sociales, Piedad del Río; la de Cultura, Carmen de la Torre; y el concejal de Movilidad, Juan Gobantes, además del alcalde pedáneo del pueblo, Domingo Rebordinos. La celebración coincidió con las fiestas en honor al patrón Santiago. El sacerdote, párroco de la iglesia del pueblo desde hace, también, 50 años, destacó el cambio de denominación por ser «un acontecimiento muy importante para la localidad, ya que forma parte de su historia, y destaca por las personalidades que asistieron, lo que indica la trascendencia del acto». Las personalidades a las que se refiere el párroco son el General Nicolás Benavides, bañezano ilustre, y José Marcos de Segovia, secretario de la antigua diputación provincial de Zamora y del Ayuntamiento de La Bañeza. El encargado de realizar los trámites para el cambio de nombre fue José Santos Simón, antiguo alcalde pedáneo, ayudado por Marcos de Segovia, quien preparó la documentación necesaria para tramitarla y presentarla al Consejo de Ministros. Éste aprobó el cambio de nombre el 14 de junio del mismo año. La modificación llegó tras el consenso de todos los vecinos del pueblo, al no parecerles adecuada la denominación, tal y como pasó con Alija de los Melones, actualmente Alija del Infantado. La elección del nuevo nombre para Sacaojos no fue dificil, ya que Santiago era y sigue siendo el patrón del pueblo, y además, hace honor a la ruta que siguen los peregrinos hacia Santiago de Compostela, destacó José Luis Santos.