César y el caudillo Sebius firman la paz
Héctor Zumeta, perteneciente al clan de los Saldanici, ganó los juegos tradicionales astures, presididos por Sebius. César, Caudillo y concejales
Héctor Zumeta de la tribu de los Saldanici es desde ayer, el poblador más forzudo de los territorios astures tras ganar los juegos que enfrentaron a competidores de todas las tribus. Todos los astures tuvieron que demostrar su fuerza, potencia y agilidad en pruebas como correr con las piernas atadas, lanzamiento de tronco levantar al compañero a través de un palo, o lanzar piedras para darle a un tronco colocado verticalmente -aunque los astures pidieron cambiar dicho tronco por la figura del César Josefus Orologius I-. Los primeros pobladores compitieron entre ellos mientras sus compañeros de tribu les jaleaban y pedían clemencia al astro sol. El Caudillo Sebius presidió estos juegos basados en actividades de carácter tradicional donde participaron un ventenar de chicos y chicas de las diferentes tribus del asentamiento astur. Medio centenar de personas presenciaron los juegos celebrados en el poblado del parque de El Melgar. Desfile de los vencedores Terminados los juegos, el vencedor Hector Zumeta y los romanos que alcanzaron la victoria en los Ludis Apollinares del sábado, desfilaron por la ciudad. Los campeones fueron acompañados de una comitiva formada por todas las tribus astures y la corte de Roma, además de las legiones. El desfile partió del parque de El Aljibe hasta la plaza Mayor. El César Josefus Orologius I y el Caudillo astur Sebius decidieron firmar, a su llegada a la plaza, una tregua de paz entre ambos pueblos. El momento marcó el regreso de César a Roma, quien dejó a los romanos calmando el dolor de sus heridas con una degustación de sopas de ajo.