Serrilla acaba con la pesadilla del puente

La Junta de Castilla y León, a través de los fondos del Plan del Carbón, ejecutará un nuevo puente sobre el río Torío a la altura de la localidad de Serrilla, en unas obras que se enmarcan en la LE-315 que une la estación de Matallana de Torío con Cármenes. El proyecto consiste en construir un nuevo paso que acabe con los embotellamientos que se producen en este punto de la carretera, a causa de la anchura escasa que presenta el vial, que en esa zona permite solamente el paso de un vehículo. Así, para evitar las peligrosas curvas que muestra el trazado en la actualidad, se diseñará un nuevo sistema, que permita conservar los dos sentidos de la circulación. El presupuesto de la obra se eleva a seis millones de euros, aunque se suman este puente y otras tres infraestructuras más, si bien la más importante es el puente de Serrilla. Se añaden al plano la mejora de las condiciones de otros tres puentes del trazado de la carretera hasta Cármenes, en Valverdín, Felmín y Santa María de Cármenes. En los tres casos, se amplía el ancho de la vía en casi 1,5 metros, con el objeto de mejorar las prestaciones actuales. Otras tres mejoras La adjudicación está a punto y además incluye las mejoras de las travesías de Vegacervera, Getino, Matallana de Torío y Cármenes. Se trabaja ya en todas ellas, para reformar las aceras y en los bordillos, a su paso por la localidad.