«Astorga y todas sus comarcas se necesitan para atraer visitantes»

Es alcalde del municipio de San Justo de la Vega por cuarta legislatura consecutiva, también en esta ocasión tras haber alcanzado su partido la mayoría absoluta. -¿Por qué aceptó el reto de ser diputado provincial esta vez? -En otras ocasiones gente de mi partido me había pedido que me presentara. Me había resistido, porque no quería dejar mi negocio, ni Astorga. Esta responsabilidad te obliga a estar en León y a viajar mucho. De hecho, de vez en cuando, si puedo, vengo, me pongo el mono y arreglo algún coche. -Su negocio siempre ha sido su gran afición, al margen de la política... -Por supuesto, yo soy mecánico y seguiré siéndolo. Yo con tal de arreglar algo que se mueva y haga ruido, lo que sea (risas). -¿Cómo ha influido este nuevo cargo en su labor como alcalde? -No ha influido mucho porque yo siempre he delegado en mi gente, hemos trabajado en equipo. Nunca me han gustado los personalismos. Ahora ellos tienen que atender algunos asuntos más. Yo hago lo que puedo, por las tardes siempre estoy en el ayuntamiento. Además, estamos comunicados las 24 horas del día por teléfono. Sólo ha cambiado que ahora tengo que trabajar más horas. -Ser diputado provincial ¿es un trampolín para acceder a responsabilidades políticas de mayor nivel? -No, nunca he aspirado a nada, ni siquiera a ser diputado. Yo siempre he dicho que somos aves de paso, que hoy estamos ahí y mañana ya no. No tengo ninguna intención de ocupar ningún cargo. Por supuesto, si mi partido quiere que asuma alguna otra responsabilidad, me lo pensaría, hablaría con mi equipo y tomaríamos una decisión entre todos. -¿Qué cree que está aportando al equipo de gobierno en la Diputación? -La presidenta me encargó el área de turismo. Estamos trabajando bastante duro y bien. Hemos hecho bastantes trabajos, que no voy a revelar, porque los va a presentar Isabel Carrasco, y tenemos grandes ideas que vamos a desarrollar. -¿Cómo está explotada turísticamente Astorga y sus comarcas? -Uno de los fines fundamentales de la Diputación es atender a los ayuntamientos de menos de veinte mil habitantes, como Astorga. Ésta es una ciudad importante para el turismo de Castilla y León, tiene mucho que ofrecer, y hay que cuidarla. -Los atractivos turísticos de Astorga ¿están bien rentabilizados? -Creo que se han hecho cosas buenas. Pero el turismo es una actividad que hay que remover todos los días. Si tú tomas unas medidas y te quedas estancado en ellas no sales adelante. Lo hecho hasta ahora está bien, pero se puede hacer más. -¿Cuáles pueden ser esas nuevas ideas? -Vamos a hacer una serie de propuestas para toda la provincia, pero permítame que no lo comente, porque no quiero estropearle la exposición a mi presidenta, que lo va a dar a conocer. -¿Astorga debe ligar su gestión turística a la promoción del entorno? -Yo siempre he entendido que Astorga y las comarcas se necesitan mutuamente, lo mismo que León y el resto de la provincia. -Comarcas como la Maragatería y la Cepeda ¿tienen algo que aportar al turismo de la zona? -Todo el mundo tiene algo que aportar, aunque sean unas comarcas que estén en decadencia. A lo mejor sería el momento de apostar más por ellas para revitalizarlas. Y no hay más fórmula que el trabajo. -La Maragatería ¿ha explotado suficientemente el cocido maragato? -Creo que sí. Es algo que ha dado fruto a diestro y siniestro, fue una idea muy buena, y sigue viniendo gente a degustarlo. Pero no sólo de pan vive el hombre, hay que hacer otras cosas. -¿Cree que la Cepeda tendrá éxito al intentar atraer visitantes por medio de la cultura? -Sí, es una buena idea, pero hay que desarrollar más. Por ejemplo: rutas, campings, hay que desarrollar la zona del pantano como área de playa, hay ríos... El turismo es algo muy delicado, hay que hacer muchos esfuerzos, de trabajo y económicos. -¿La Diputación ha barajado como posible atracción turística los restos de la minería romana del oro en el entorno del Teleno? -Vamos a barajar muchas opciones, y ¿por qué no?, ésa misma, u otras parecidas, para revitalizar el turismo en esa zona y en el resto de la provincia. -La existencia del campo de tiro ¿es un obstáculo para ello? -Creo que no. La polémica sobre él seguirá existiendo, pero hay que reconocer que el cuartel de Astorga está aquí porque existe el campo de tiro, y si no estuviera la ciudad habría decaído rápidamente. Tratemos de convivir con ambas opciones: protegiendo los restos y dejando que en un momento determinado se pueda usar el campo de tiro. Hay que buscar fórmulas con el Ministerio de Defensa, y es posible, porque la zona militar se usa muy poco tiempo.