Las escuelas y talleres de empleo facilitaron formación a 351 personas

Un total de 351 personas lograron acceder a formación en las casas de oficio, escuelas taller y talleres de empleo desde finales de los años ochenta del siglo XX, según calculó ayer el alcalde de Astorga, Juan José Alonso Perandones, en la clausura del taller Hipocausto. Todas estas iniciativas de formación ocupacional desarrollaron un total de 14 especialidades, las últimas de las cuales fueron fontanería-calefacción y restauración de muebles. Los alumnos de estos dos módulos recibieron ayer sus correspondientes diplomas. El proyecto de Hipocausto estuvo centrado en la instalación de la calefacción en la sede del taller y en la adecuación de mobiliario antiguo que perteneció a varios astorganos ilustres o que es propiedad del municipio. El Ayuntamiento de Astorga inició la tradición de este tipo de proyectos con una casa de oficios del textil, a la que, en 1991, dio paso la primera escuela taller. A ésta sucederían otras cinco iniciativas similares y cuatro talleres de empleo, el último de los cuales fue el clausurado ayer. Su sucesor, Solarium, comenzará el próximo viernes. De las 16 personas que asistirán a él, diez son mujeres, y seis, hombres. Desempleo femenino Al acto acudieron ayer, además de Perandones, el gerente provincial del Ecyl, Francisco Javier Otazu, que recalcó el hecho de que muchos de los alumnos del proyecto Hipocausto fueron mujeres. En este sentido, indicó que el desempleo femenino afecta sobre todo a las mayores de 25 años, motivo por el cual el servicio regional de empleo, que tiene la competencia en la concesión de este tipo de proyectos, y la propia Junta, habían iniciado una estrategia de formación ocupacional dirigida a este colectivo, dijo. También participaron en la clausura varios ediles del equipo de gobierno y la oposición del Ayuntamiento de Astorga junto al personal del taller, encabezado por su directora, Concepción Crespo.