El concejal del PSOE dimite «para no causar problemas» a su grupo

Uno de los vocales en funciones de la comisión gestora, José María Domínguez, presentó su renuncia al cargo de concejal del PSOE que ocupaba en la corporación municipal de Valderrey, según confirmó él mismo. Domínguez admitió que su dimisión se debió a la polémica suscitada por el asunto del cobro a los vecinos de la cuota de 20 euros para entregar al médico. «No quería perjudicar a mis compañeros, ni al grupo en el consistorio», aseguró. Él no dijo en ningún momento a este periódico que la cantidad recaudada fuese destinada a agasajar al facultativo al final de la legislatura, como indicó el presidente en funciones. «Esto se hacía hace años, y llegó un momento en que ya no se hacía porque los médicos ya cobran su sueldo. Al cambiar la doctora acordamos no darle el dinero», dijo, pese a que admitió que la gestora «seguía pidiendo (a los vecinos) dinero para el médico y para la fiesta del pueblo». El alcalde de Valderrey, Gaspar Cuervo; el teniente de alcalde, Antonio Alonso, y el concejal Ángel Núñez, también confirmaron la renuncia de Domínguez, y dijeron que se había producido «a raíz de los hechos, aunque en el escrito en el que la hizo oficial él aludía a motivos personales», precisaron. Sin embargo, los tres mostraron su convencimiento de que su marcha fue motivada «por su deseo de no perjudicar al Ayuntamiento, ni al PSOE, puesto que él entendía la gravedad de los hechos y la situación en la que ponía a su grupo si el asunto seguía adelante», aseguraron. Así, el regidor consideró que la dimisión de Domínguez «es una cuestión que debe ser valorada, puesto que desconocemos cuál era su responsabilidad en los hechos, que debería corresponder más al presidente» de la gestora, dijo. Los tres aseguraron que «mientras Domínguez fue concejal socialista, entre los años 2003 y 2007, cedió el dinero que percibía por la asistencia a plenos para el disfrute de los vecinos del pueblo, para la colaboración en fiestas y otras actividades sociales y culturales». El alcalde y sus dos ediles indicaron que no forzarán la dimisión de Martínez como concejal del PP. «Legalmente no podemos hacerlo, porque al Ayuntamiento no lo ha lesionado», explicaron. «Si pudiéramos pedir una reprobación de él lo haríamos porque ocupa cargos públicos», añadieron, al tiempo que indicaron que sí le pedirán explicaciones de los hechos.