Mucha gente y frío para una feria

La villa de Cistierna celebra durante todo este fin de semana la feria de Santa Catalina, que se inauguró ayer con la presencia del diputado provincial Matías Llorente, el alcalde de Cistierna y diputado, Nicanor Sen, y los alcaldes de Boñar y Sabero, Roberto Álvarez y Juan Carlos de Marco. El recinto ferial, situado en la plaza Carlos Álvarez, acoge a una treintena de stands con productos de la comarca y la provincia. Numeroso público se dio cita durante la mañana, en un día marcado por el intenso frío, especialmente para ver el proceso de la matanza del cerdo, aunque previamente habían degustado la «parva» a base de dulces, pastas y orujo. También el público asistente pudo degustar la tradicional morcilla Morvega. La feria de Santa Catalina ha sido de siempre una de las principales ferias de la villa de Cistierna donde el protagonista fue el ganado. Con el paso de los años y la pérdida de la mayor parte la ganadería, esta feria se ha convertido en un escaparate para dar a conocer los productos agroalimentarios de la comarca de Cistierna, según recordaba el alcalde de Cistierna, Nicanor Sen, quien señaló que el sector agroalimentario es una de las fuentes de empleo más importantes de Cistierna. Asimismo, cada año se van incorporando nuevas actividades complementarias de la feria como es la jornada de la matanza que ya cumple su quinta edición. La novedad en esta edición ha sido el carrusel de burros para pasear a los más pequeños. También congregó mucha gente el magosto de castañas asadas que sirvieron para aplacar un poco el intenso frío que hacía ya entrada la tarde. Los actos de la feria continúan hoy domingo con una exposición de ganado a partir de las 10.00 horas en la plaza Carlos Álvarez. Una hora más tarde se iniciará la exposición de mastines y el carrusel de burros para pasear a los más pequeños. La mañana se cerrará con una de gustación de morcillas, jijas y dulces de la zona. Por la tarde, a partir de las 19.30 horas, habrá un concierto de la coral Ángel Barja en la iglesia de Cristo Rey de Cistierna, que pondrá fin a la feria.