El proyecto de las obras ya ha sido adjudicado por un importe cercano a los 300.000 euros
La recuperación de la Fuente de los Prados comenzará en enero
Mansilla de las Mulas contará con una zona lúdica y recreativa al lado del río Esla
La recuperación del entorno de la Fuente de los Prados en Mansilla comenzará a ejecutarse en el próximo mes de enero. Las obras de rehabilitación y adecuación medioambiental ya han sido adjudicadas a la empresa Ceteco S.A., Centro Técnico de Construcciones, y según la alcaldesa, María de la Paz Díez, «se han comprometido ha realizar las obras cuanto antes». El significado que esta obra tiene para los vecinos de Mansilla es la recuperación de una zona recreativa donde tradicionalmente se reunían para llevar a cabo fiestas campestres, con zona de baño, y un lugar de parada de recreo para muchos de los autobuses que por allí pasaban. Por ello, la alcaldesa incluyó la recuperación de esta obra en el pasado programa electoral. La pretensión es que con la zona también se recuperen las antiguas costumbres y romerías. El proyecto La recuperación del entorno de la Fuente de los Prados consistirá en la rehabilitación de la orilla del Esla con la instalación de un alumbrado adecuado y un merendero. Además, contempla la ejecución de un paseo y carril bici, junto a la creación de un parque infantil. Según la legislación, el proyecto tendrá que incluir la disposición de unos servicios públicos. La alcaldesa de la localidad asegura que esta actuación contempla la «no retirada de ninguno de los árboles que allí existen. Es un proyecto medioambiental y como tal, no se tocará ningún árbol». La financiación Las obras han sido adjudicadas, tras la publicación del concurso en el boletín oficial el pasado 5 de noviembre, por un importe cercano a los 300.000 euros. De la cantidad inicial, el Ayuntamiento de Mansilla de las Mulas consiguió una subvención el año pasado de Adescas cuya cantidad es de 187.000 euros para la rehabilitación y adecuación medioambiental de la Fuente de los Prados. Esta subvención obligó al Ayuntamiento ha llevar a cabo una primera anualidad que consistió en rasear la zona, instalar una fuente nueva antibandalismo con cañerías de agua natural y recordar la antigua fuente con una lápida y una inscripción. Esta primera actuación tuvo un importe de 12.000 euros.