Alija del Infantado | Los manifestantes representaron tres entierros, uno por cada persona fallecida sin atención
Casi 300 vecinos se manifiestan en Valladolid por el Centro de Salud
José Antonio Crespo: «No vamos a permitir que la gente del pueblo siga muriendo como pasa ahora»
Entre 250 y 300 vecinos de la localidad de Alija del Infantado (León), según la organización, se manifestaron ayer por las calles de Valladolid para reclamar a la Junta la puesta en funcionamiento de un centro de salud que atienda las necesidades de los habitantes de la zona. «No vamos a permitir que se siga muriendo la gente del pueblo como está pasando», declaró a Ical el alcalde del municipio, José Antonio Prieto Crespo, que revalidó su cargo en las pasadas elecciones tras abandonar las filas del PP para representar a UPL. Los vecinos realizaron un recorrido desde la Plaza Mayor hasta la Consejería de Sanidad, con el objetivo de llamar la atención sobre la situación por la que atraviesan. «Llevamos casi 17 años reclamando unos servicios médicos de mínimos y hasta hace poco no nos habíamos manifestado para no hacer ruido, pero ahora pensamos seguir protestando hasta que esto se solucione», señaló. Experto en reordenación territorial, Prieto destacó que «el pueblo cuenta con todos los servicios: un pequeño centro de comercio, un cuartel de la Guardia Civil, una residencia de ancianos, algunas industrias, un colegio, pero la población está muy envejecida, como sucede en toda Castilla y León, y necesita esas prestaciones». Tras haber reconocido en dos ocasiones (julio de 1992 y diciembre de 1997) a Alija del Infantado como Zona Básica de Salud en el Boletín Oficial de Castilla y León, el primer edil de ese núcleo poblacional se preguntó por el «olvido del Gobierno regional» y argumentó que «quizá crean que se trata de un capricho». Vecinos y simpatizantes se desplazaron en la mañana de ayer hasta Valladolid para poner en escena un entierro con tres ataúdes, portados por familiares y amigos de las tres personas que, según el organizador, José Crespo Peñín, han perdido la vida en los últimos años por no contar con la atención médica necesaria a tiempo. Casos particulares «A un chico se le murió la madre en los brazos tras sufrir un infarto y después de que el médico llegara hora y media después, y ahora tenemos a un chaval joven de 20 años que se cayó en el frontón y estuvo envuelto en un charco de sangre hasta que lo vinieron a recoger», detalló. Según un estudio poblacional baremado encargado por el Consistorio, la localidad cuenta con una media de 2.062 habitantes cada día del año, a los que hay que sumar los residentes en las villas de los alrededores, dependientes del mismo Ayuntamiento. Esa cifra se incrementa, según el alcalde hasta las 3.500 personas, en fechas señaladas como las vacaciones de verano, Semana Santa y Navidad, o algunos fines de semana.