La Feria del Gallo de Pluma y Mosca Artificial atrajo a más de 8.000 personas durante el fin de semana
Los criadores exigen a la Diputación y a la Junta un sello de calidad
Aficionados y expertos coinciden en la importancia de la marca para dar un empuje definitivo
La duodécima Feria del Gallo de Pluma y Mosca Artificial que se ha desarrollado durante este fin de semana en La Vecilla ha vuelto a reunir a cientos de personas. El éxito de este año ha sido tanto de público como de participantes artesanos de la mosca seca. Desde la organización se destaca que se han superado las ocho mil visitas durante el evento. Una cifra que avala de nuevo la continuidad para las próximas ediciones, pero los criadores y los expertos siguen aclamando, «de una vez por todas», la identidad de un sello de calidad para esta especie de gallo de pluma, única en el mundo y, que se convierte en muchos casos, en la base de la economía de varios pueblos del municipio del Curueño. En palabras del presidente de la Asociación de Criadores de Gallos de León, Tomás Gil, que agrupa a un buen número de granjas, asegura a que el vecindario de las localidades del Curueño donde se cría el verdadero y único gallo de pluma de León. «Llevamos más de cuatro años esperando a que la Diputación y la Junta nos concedan el sello de calidad, que sería lo mismo que a los alimentos una denominación de origen, aunque de momento sólo tenemos permiso para comercializar la misma con el escudo de León», señala. Sello de calidad del gallo Esta premisa es la que reclaman también expertos y aficionados que coinciden en su importancia ya que aseguran que tras doce años del desarrollo de la Feria del Gallo de La Vecilla, y el criterio unificado de todos los que se hacen cargo de su empuje, refleja la necesidad de alcanzar la marca de calidad como paso previo para dar el tirón definitivo que permita que la iniciativa resulte exitosa del todo. De esta forma, se manifestó ayer la alcaldesa de La Vecilla, Manuela García Robles, quien ratificó que va a apoyar a los criadores y artesanos para conseguir el impulso definitivo del sello de calidad del gallo de la Vecilla, así como intentar, tras el éxito obtenido en esta edición, potenciar el turismo a través de la pesca conjuntamente con la gastronomía, en consonancia con los establecimientos hosteleros del municipio del Curueño.