«Intentaron estrangularla al menos durante tres minutos»
Los forenses y la defensa difieren a la hora de considerar probado si los daños cerebrales irreversibles que sufrió la víctima fueron causados por el reo «cuyo estado mental estaba condicionado»
El letrado de la defensa hizo constar en su informe final que, practicada la prueba oral, no quedó probado que el daño cerebral sufrido por la víctima fuera causado por el acusado: «Hay sospechas para justificar una duda, pero el principio del in dubio pro reo está más vigente que nunca en este caso. La declaración que ha prestado el sospechoso es verosímil y no encierra contradicciones. Las atenuantes que proponemos son de sentido común, su actuación está condicionada por el estado mental y la agravante de parentesco está fuera de lugar porque no hay vínculo afectivo». No obstante, los forenses resultaron explícitos: «Los daños cerebrales pudieron deberse a una maniobra de estrangulación de entre tres y cinco minutos de duración. Las heridas que presentaba el acusado no iban encaminadas a conseguir quitarse la vida y sólo la víctima presentaba signos de autodefensa». Respecto a la posibilidad de que el sospechoso tratara de ahogar a su madre colocando una bombona de gas junto a la cara, sentenciaron: «El gas no causó la asfixia».