Arden 300 toneladas de paja en una explotación de ganado vacuno

Alrededor de 300.000 kilos de paja, según estimaciones de su propietario, ardieron ayer en una explotación de vacuno de Palacios de la Valduerna, que, pese a lo aparatoso del incendio, no sufrió daños. Tampoco resultaron afectados el ganado, alrededor de 400 reses, estabulado en la explotación ni quienes trabajan en ésta. El fuego se originó en los aledaños de la explotación, situada a cuatro kilómetros de La Bañeza, junto a la carretera N-VI. Por razones que se desconocen, un terreno adyacente a la finca comenzó a arder entre las cuatro y las cinco de la tarde. Las llamas llegaron a superar el vallado que cierra la granja, aunque fue probablemente una chispa la que produjo que el fuego llegara al enorme montón de paja, situado en el patio de la instalación. Efectivos de la Guardia Civil y de la policía Local de La Bañeza se personaron en el lugar de los hechos tras tener conocimiento del siniestro. El camión del servicio de extinción de incendios del Ayuntamiento de La Bañeza fue la primera dotación en hacer frente a las llamas, con el objetivo de que éstas no alcanzasen una de las naves de la explotación. Con una excavadora Al camión bañezano se sumó poco después una dotación del parque de bomberos del Ayuntamiento de León. A estos efectivos se sumó también una excavadora de la propia explotación. Ante la inevitable combustión de las balas de paja, la retroexcavadora apartaba la más cercana a la nave más próxima, mientras los bomberos protegían al vehículo de llamas con el agua de sus mangueras, tratando de enfriar los neumáticos y evitando que la paja ardiendo que le caía encima pudiera afectar a la máquina. Las cisternas del Ayuntamiento de La Bañeza y de los bomberos de la capital tuvieron que turnarse en sus viajes a la ciudad para rellenar sus depósitos y, de esta manera, evitar tiempos muertos en la lucha contra las llamas. Si bien se pudo evitar la propagación del fuego, a última hora de la tarde de ayer se estimaba que las labores de extinción se prolongarían hasta la madrugada, una vez que se hubiera consumido todo el material combustible.