| Reportaje | Aquellos vadinienses |
Sobre los restos de romanos y cántabros
Las jornadas vadinienses del instituto de Cistierna dan a conocer a los alumnos el patrimonio y la historia de la comarca
El instituto Vadinia de Cistierna celebra las segunda jornadas vadinienses que se inauguraron ayer con la presentación del libro Tridio Alonge, el último relincho vadiniense, a cargo de su autor Saturnino Alonso Requejo. El objetivo de estas jornadas, según recordó la directora del centro, Loli Figueira, es que los alumnos conozcan el patrimonio histórico y cultural de Cistierna y sus restos arqueológicos de los enfrentamientos entre romanos y los pueblos cántabros, además algunos de ellos serán visitados en distintas salidas guiadas. El historiador Siro Sanz recordó que se está viviendo un nuevo renacimiento de la cultura de la montaña oriental dado que se empieza a pone en valor poco a poco los restos que existen en la zona. Saturnino Alonso, dijo que su libro está concebido como una «hila» en la que el lugarteniente de Tridio le relata a su nieto Bobecio la aventura de las guerras cántabras acaecidas desde Peñacorada de Cistierna hasta Burón (Vergida). A lo largo de estas jornadas historiadores como Eutimio Martino, José Fernández Arenas y Siro Sanz se encargarán de dar a conocer a los alumnos del instituto todo lo relacionado con los vadinienses, los cántabros y los romanos de esta comarca.